El sur se traga la basura
Italia y España encabezan la demanda televisiva europea de los programas más escabrosos o amarillistas
La telebasura es un fenómeno poco extendido, en contra de lo que pudiera parecer desde España. Sólo nuestro país, Italia y EE UU emiten programas escabrosos o amarillistas sin apenas problemas legales. En los principales estados de la Unión Europea la situación está regulada: apenas hay telebasura, o si la hay, en horarios minoritarios, debido a una legislación clara y a los gustos de los espectadores. Sin embargo, en Estados Unidos, el referente televisivo por excelencia, la telebasura goza de excelente salud. La demanda de los telespectadores ha provocado que asuntos con morbo relacionados con famosos hayan desplazado de la apertura de los informativos de calidad a los debates políticos o la guerra de Bosnia.
Sexo, no, por favor, somos británicos
El sexo, la violencia, el mal gusto y la decencia están muy controlados en la televisión británica. Además de la normativa que se autoimponen los responsables de los cuatro canales de televisión, incluidos los dos estatales de la BBC, existe un organismo independiente, el Broadcasting Standards Council (BSC), que vela por las imágenes que llegan a los telespectadores.Un programa presentado con palabrotas u otros usos indebidos del lenguaje difícilmente pasaría la censura del BSC. Recientemente, un programa juvenil del canal comercial Channel 4 fue amonestado por pasar imágenes de una joven comiendo gusanos. Las autoridades lo consideraron un atentado contra la dignidad.
Sin embargo, la estricta normativa se relaja en los horarios nocturnos (a partir de las nueve de la noche para los británicos), aunque también tienen los contenidos limitados.
En los últimos tiempos, son los espacios dedicados a la reconstrucción dramática de crímenes los que más se acercan al límite admitido por la normativa. Su popularidad, sin embargo, está creciendo e influyendo en la puesta en escena de nuevos y más atrevidos casos.
Reconstrucción de crímenes
Los programas de la BBC dedicados a la reconstrucción dramática de crímenes alcanzan a una audiencia media en torno a los 11,5 millones de espectadores. Como referencia, el programa lider en el Reino Unido, el culebrón East enders (Gent del barri en TV-3), supera los 19 millones de telespectadores.
Este experimento se puso en práctica hace 10 años y ha sido actualizado periódicamente. Actualmente, en Crimewatch UK se dramatizan tres sucesos de actualidad en el país. Estas escenas simuladas van acompañadas de inserciones fotográficas tomadas por cámaras de seguridad o, en algunos casos, por los propios ciudadanos. Al final del programa se urge a los espectadores a contactar con la policía -se incluye un número gratis de teléfono- con datos que puedan conducir al arresto del presunto criminal.
Crimewatch UK cubrió el caso del niño Bulger, asesinado el año pasado en Liverpool, así como diversos atentados terroristas. Hace dos años, la BBC presentó Crimewatch file, un programa mensual que reconstruye y analiza un caso en todos sus aspectos. Ambos programas se pasan a horas punta de la noche.
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