Roca no dirigirá la campaña de las europeas
El secretario general de Convergència Democrática (CDC), Miquel Roca, ha renunciado a coordinar la campaña de Convergència i Unió (CiU) para las elecciones europeas. Roca, que completa así un progresivo distanciamiento de las tareas organizativas de su partido, comunicó su decisión a la ejecutiva de CDC el pasado día 24 -a la que no asistió el presidente del partido, Jordi Pujol, de viaje en Alemania-, aunque hubo un pacto de silencio para que no trascendiera la renuncia de Roca hasta el día 6, fecha en que se celebrará el consejo nacional de CDC. Es la primera vez que Roca hace renuncia expresa a dirigir el aparato electoral de CiU en unos comicios.La dirección de la campaña de los comicios europeos -previstos para el mes de junio- recaerá en Pere Esteve, miembro del comité ejecutivo y responsable de medios de comunicación de CDC desde diciembre de 1992. Esteve, de 51 años e ingeniero industrial, está considerado un hombre de confianza de Pujol.
Colaboradores de Roca explicaron ayer que la renuncia de éste a coordinar las europeas es resultado de un triple análisis. En primer lugar, el conflicto con Unió Democrática, el socio electoral de Convergència. La segunda razón es el hecho de que las europeas se presenten muy difíciles para los nacionalistas catalanes, ya que previsiblemente la bipolarización del voto será superior a la de las pasadas generales. Y, por último, porque Roca se ha visto "sorprendido" por la elección de Ramon Camp como nuevo secretario de organización de CDC. Éste desplaza a Enric Renau, un histórico colaborador de Roca que ocupaba el cargo en funciones desde la renuncia de Josep Caminal.
Estos dirigentes próximos a Roca sostienen en privado que la renuncia del secretario general tiene como objetivo trasladar a todos los rincones del partido que su situación "es de gran incomodidad" y que la crisis en Convergéncia no está cerrada. El secretario general de CDC sigue defendiendo que el rechazo de la oferta del presidente del Gobierno, Felipe González, para que CiU entrara en el Ejecutivo fue un error que tendrá un coste electoral importante. En consecuencia, Roca "no se quiere hacer responsable" de los resultados que se puedan producir por una supuesta "actuación política equivocada", señalan estos sectores.
