Gil negocia con sus jugadores rebajar sus fíchas
El Atlético abrió su enésima crisis. Emilio Cruz , el entrenador, no reconsideró su de cisión y abandona el equipo. José Luis Romero, el secretario técnico, le sustituye de forma provisional y, aunque mantiene a Carlos Aguiar como segundo, reincorpora a Iselín Santos Ovejero al cuerpo técnico. Mientras tanto, Jesús Gil, el presidente, quiere hacer participar a sus jugadores de las pérdidas económicas del club y que, si no se clasifican para la Copa de la UEFA, dejen de cobrar parte de sus fichas. Una comisión de la plantilla discutirá con él esta propuesta en los próximos días.
El futuro del Atlético se ha ennegrecido. Gil sabe que la situación deportiva del equipo afecta negativamente a su economía: pobres taquillas le aguardan en lo queda de temporada. Sobre todo, si no consigue clasificarse para la Copa de la UEFA. Y el presidente quiere implicar a sus fubolistas.. Así se lo apuntó el domingo, tras la derrota ante el Rayo, y se lo repitió ayer en una reunión que mantuvieron en el estadio Calderón. Su intención es la de rebajar sus fichas si no alcanzan una plaza europea.Una comisión de la plantilla, que no está por la labor, discutirá el asunto con Gil en los próximos días. El presidente está decidido a conseguir que sólo cobren en función de unos objetivos. "Más que amenaza", comentó ayer, "es una realidad. Les he dicho que, si sacan esto adelante, bien, y que, si no, me tendrán que ayudar a soportar el daño económico del club. Si el Atlético es un club grande y soporta fichas elevadas para sus jugadores, pero los resultados no funcionan como debían, las pérdidas nos tienen que afectar a todos".
"Ellos", añadió, "son los que pueden sacar el equipo adelante. Si no se mentalizan, ya pueden pasar 20 entrenadores que esto no se arregla". Por primera vez desde su acceso al club, Gil disculpó al técnico y recriminó exclusivamente a los futbolistas. De hecho, no estaba por la labor de aceptar la dimisión de Cruz.
Pero la decisión del técnico era irrevocable. "Le dije a Gil", explicó ayer Cruz, "que lo conveniente era el cambio de entrenador porque el Atlético necesita un reactivo. Una victoria en diez partidos es un balance que este club no se puede permitir. Busco el bien de la entidad. Si no lo entendiera así, no me habría ido".
Cruz quiso salir del club sin levantar polémicas. "Me voy satisfecho por la respuesta de los jugadores", aseguró; "se han esforzado y acatado mis órdenes. No me voy decepcionado. Pero lo más importante son los resultados y ahí no estoy satisfecho".
En los diez partidos que Cruz dirigió al Atlético, ocho de Liga y dos de Copa, se sumaron una victoria (Racing), cinco empates (Valladolid, Oviedo, Tenerife, Real Madrid y Lleida) y cuatro derrotas (Deportivo, Athletic, Real Madrid y Rayo). Pese a lo rotundo de los resultados, el equipo había experimentado una mejoría evidente hasta la eliminación de la Copa ante el Madrid.
De hecho, Cruz señala a la fortuna como uno de los factores que han influido en su pésimo balance: "No ha habido. suerte en los resultados. Han fallado cosas. Las asumo y por eso pido mi relevo. No se puede vivir sólo de la suerte, pero, si a uno le tocan 500 millones en la lotería, verá cómo sí influye. Todo tiene remedio. Vamos a ver si viene otro que tenga más culo que yo".
La plantilla ha encajado con sorpresa y disgusto la postura de su técnico. Gil reconoció que en la reunión de ayer algunos jugadores le pidieron la continuidad de Cruz. "El que venga ahora", comentó Caminero, "necesitará un tiempo de adaptación y nosotros no lo tenemos. Yo, habría preferido que se quedara". Para Solozábal, "cuatro entrenadores en cinco meses son demasiados".
Romero, el secretario técnico, es la baza escogida por Gil para resolver la dimisión de, Cruz. Romero se hará cargo del equipo e incorporará a Ovejero al cuerpo técnico. Aguiar, el segundo de Cruz, y José Ángel García, el preparador físico, permanecen en sus cargos. "Es una situación que no nos gusta afirmó, "pero el club no se puede quedar sin dirección técnica. Para que todo continúe igual y el equipo no se resienta, lo cogemos nosotros. Pero, a la vez, iremos buscando el técnico' idóneo. Mi intención no es seguir. Sólo, lo justo y necesario".Tras acceder en noviembre a la secretaría técnica en sustitución de Rubén Cano, Romero se convierte de esta forma en el cuarto entrenador-del Atlético en lo que va de temporada y el 16º de la era Gil Es la 23ª vez que el equipo de Gil cambia de técnico en sus siete años de gestión. Luis Romero ha llevado, entre otros, al Betis, el Cádiz, el Sabadell y el Logroñés.
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