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Entrevista:

"Creí que había perdido el tren"

El Real Madrid le cerró la puerta dos veces. Ahora se arrepiente. José Luis Pérez Caminero, de 26 años, se ha convertido en uno de los futbolistas españoles de moda y es líder en el Atlético y la selección. El madridismo sufrió el martes su desquite.

El martes fue un día especial para Caminero. Volvía al Bernabéu, el escenario en que inició su carrera y que consagra a los grandes futbolistas. Superó el trance: dos goles y una actuación magnífica.Pregunta. ¿Se cumplió uno de sus sueños, pero con la camiseta equivocada?

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Respuesta. Mi sueño se cumplió íntegramente. Deseaba estar donde ahora, en un equipo grande y en la selección. Mis objetivos no han cambiado en cinco años, sólo mis logros.

P. Por dos veces el Madrid le dejó escapar. Ahora se tira de los pelos.

R. Es muy dificil acertar. De una cantera, y más de una tan prolífica como la del Madrid, salen muchísimos jugadores y todos no tienen cabida. Con mayor o menor acierto en casos puntuales, el Madrid ha sabido formar un buen conjunto.

P. ¿Es necesario irse lejos para ser reconocido?

R. Puede. Por eso llega un momento en la vida en que uno debe decidir lo que quiere. El Valladolid me brindó la oportunidad de jugar en Primera y acepté. No me arrepiento.

P. Pero ha tenido que pasar muchos años en el exilio para que su trabajo sea valorado.

R. Llegué a pensar que el tren de los grandes se me había escapado para siempre. Me había hecho a la idea de que mi futuro sólo pasaba por el Valladolid. El fútbol tiene estas cosas. De pronto, en un minuto, llegas a un grande y todos aprecian tu trabajo. Es una cuestión de muchos años de esfuerzo y de un golpe de suerte.

P. ¿Ha llegado ya donde quería o le quedan metas?

R. De momento, estoy donde quería, en un grande y en la selección. Buena parte de mis sueños se han cumplido. El Atlético me llena totalmente.

P. ¿Cómo encaja el haberse convertido en el ídolo de una afición que hasta hace poco le silbaba?

R. Es un poco paradójico. Antes, el Calderón me silbaba. No era un jugador de su agrado. Ahora me lo reconoce todo.

P. ¿Es consciente de que con la misma rapidez con que ha subido puede bajar?

R. Es lo que tiene esto. Por eso hay que saber aprovechar los buenos momentos y superar los malos. Saborear el éxito, pero sin dejar de pensar en lo malo que te puede venir. No todo es bonito en el fútbol. Habrá un día en que las cosas no me saldrán y tendré que estar preparado para asumirlo y, sobre todo, para escapar.

P. Su éxito le ha llegado como centrocampista, aunque ha jugado también de extremo, de interior y de libre. Dicen que en el Valladolid usted se negó a jugar en su posición actual.

R. No es que me negara. Maturana me probó, pero llegó a la conclusión de que no era mi sitio. Lo que pasa es que, como yo andaba sobrado atrás, la gente comentaba que en el centro del campo lo podría hacer mejor.

P. Los hechos dan la razón a esos comentarios.

R. Siempre he dicho que donde más cómodo juego es de libre y lo mantengo. Todo es cuestión de acostumbrarse. Lo que pasa es que, cuando actúas como centrocampista y marcas goles, tu trabajo trasciende. Los goles son la base del fútbol.

P. Ha heredado el liderazgo que dejaron Futre y Schuster tras su marcha.

R. No creo en los líderes. Es bonito escuchar 'el Atlético de Caminero', pero no es real. No hay líderes en el Atlético. Hay gente que trasciende más con vistas a la prensa y los aficionados. Ahora paso por un momento en que todo me sale bien y por eso mi nombre suena.

P. ¿No perder los nervios con el balón en los pies y su espíritu ganador son sus virtudes?

R. Creo que sí. Confío mucho en mis posibilidades y me muestro tranquilo. Llevo dentro el espíritu ganador.

P. ¿Se lo inculcó el Madrid?

R. Quizá. Allí, desde niño, te acostumbras a ganarlo todo. Aun así, creo que es un factor que depende más de la mentalidad de cada jugador.

P. Al Atlético se le acusa de carecer de ese instinto ganador.

R. No lo sé. Yo acabo de llegar. Creo que es un equipo ganador, aunque acaso en los momentos cruciales no sepa aguantar la presión.

R. ¿Sería bueno que a Emilio Cruz le dieran el tiempo que no han concedido a otros?

R. Los cambios de entrenador son circunstancias a las que los jugadores se acostumbran. Creo, eso sí, que Cruz es un entrenador válido, con las ideas muy claras y con franqueza a la hora de decirte. las cosas que no le gustan.

P. Eliminado de la Copa de la UEFA y descartado de la Liga, al Atlético ya sólo le queda la Copa del Rey.

R. De eso, nada. La Liga todavía está viva. Estamos lejos del liderato, de acuerdo, pero en tres partidos todo cambia. No se puede arrojar la toalla tan pronto. Es cierto que tienen que tropezar muchos equipos, pero esta Liga está muy rara.

P. ¿Gol, pase o regate?

R. Un pase de gol. Siempre.

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