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Cardenal asegura que los guardias que torturaron a Linaza cumpliran la sentencia

"La sentencia del Tribunal Supremo habrá que ejecutarla. No hay ninguna duda al respecto. Estudiaremos la normativa y lo que diga será lo que haremos", dijo ayer el director general de la Guardia Civil, Ferran Cardenal, a propósito del reciente fallo del Supremo que condena al teniente coronel Rafael Masa y a otros ocho guardias civiles por torturar hace 10 años al padre del presunto etarra Tomás Linaza.

Cuando un periodista le replicó que la ley otorga al director del cuerpo la facultad de elegir entre tres opciones, entre ellas la expulsión del condenado, Cardenal se escabulló argumentando: "Habrá que estudiarlo. En estos momentos no puedo emitir ningún juicio. Pero es una sentencia del Supremo y habrá que ejecutarla, como se ejecuta cualquier otra sentencia".

El responsable de la Guardia Civil no quiso hacer "suposiciones" sobre si el Gobierno indultará o no a Masa, considerando "improcedente" que él opinase sobre este asunto.

Cardenal descartó que el atraco perpetrado por varios individuos armados contra un furgón blindado en Valencia, el pasado sábado, sea obra del Grapo, si bien añadió que todavía hay una investigación pendiente para poder afirmarlo.

Durante su primera comparecencia en el Congreso, el nuevo jefe del instituto, armado aseguró que el tráfico de drogas en la ruta del bakalao "no tiene las dimensiones tan enormes como en principio se pensaba". Pero agregó: "Esto no quiere decir que haya que minimizar el problema".

Cardenal facilitó: datos sobre las aprehensiones de droga realizadas durante los fines de semana tras la puesta en marcha de un dispositivo policial en esta ruta, explicando que es utilizada por unas 10.000 personas durante las noches de los sábados, según estimaciones de la Guardia Civil de Tráfico.

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Decomisos

En el puente de la Constitución, la Guardia Civil decomisó en la ruta del bakalao 109 gramos de hachís, siete de cocaína, 1,5 de speed, seis dosis de éxtasis, 19 de marihuana y una dosis de anfetaminas. En los anteriores fines de semana los decomisos fueron mayores, aunque "no especialmente altos", lo que demuestra que está dando resultados la operación policial puesta en marcha por orden del secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera. También hubo 18 detenidos por alcoholemia.El director general de la Policía, Carlos Conde-Duque, informó en el Congreso que desde octubre de 1992 hasta el mismo mes del presente año fueron detenidos en Madrid 150 presuntos cabezas rapadas, el 20% de los cuales tenía antecedentes por hurto o drogas. La actuación de estos grupos se produce mayoritariamente durante los fines de semana, sin que de ellos formen parte niños de papá ni marginados. "No es un fenómeno cultural, sino más bien una moda poco agradable", declaró el director de la policía.

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