Fusión de dos compañías para crear el mayor canal comercial británico
La decisión de la compañía Carlton Communications PLC de fusionarse con la compañía Central Independent Television es el primer paso para la creación de nuevas alianzas en el mercado de la televisión privada británica. El anuncio, que creará la mayor cadena privada de televisión del Reino Unido, se produjo cinco días después que el ministro de Comunicaciones, Peter Brooke, anunciara que se flexibilizarían las normas para las fusiones entre cadenas privadas de televisión. El precio de esta fusión es de 758 millones de libras (unos 152.000 millones de pesetas). El nuevo grupo, que se podrá constituir cuando el Parlamento apruebe la nueva legislación sobre televisiones privadas, a comienzos del año próximo, tendrá una audiencia de 20 millones de espectadores, el 36% de la población británica.
Tanto las acciones de Central como las de Carlton registraron una fuerte alza en la apertura del mercado.
Los analistas del mercado británico predicen nuevas fusiones entre las 14 cadenas regionales independientes que existen en el Reino Unido. El ministro Brooke señaló que la nueva legislación permitiría a una misma compañía poseer al menos dos de las 14 licencias que forman la red comercial.
La liberalización de las normas había sido solicitada insistentemente por las grandes compañías británicas, incluida Carlton, porque las compañías de televisión de la Comunidad Europea podrán participar desde finales de este año en el mercado británico. Se producía así la paradoja de que una compañía francesa, italiana o alemana podría participar en una compañía británica, pero no podrían hacerlo las empresas rivales del mismo país.
