Los jueces prometen más rigor con los 'cabezas rapadas'

La alarma social también ha llegado a los juzgados. Los jueces de lo penal de Madrid son partidarios, en general, de aplicar la ley con el máximo rigor a los cabezas rapadas, según una consulta efectuada ayer por este periódico. Algunos jueces se plantean incluso ser más estrictos a la hora de concederles la remisión condicional de la pena (dejar a un condenado en libertad condicional si éste es penado con menos de dos años de prisión y carece de antecedentes penales).Los magistrados dependerán siempre de la gravedad de las lesiones y de las circunstancias que influyan en la agresión, pero, en principio, tenderán a aplicar el máximo permitido (seis años es el tope de condena para estos delitos de agresión, y si tienen entre 16 y 18 años la pena puede oscilar entre los cuatro y seis meses).

"Es un tipo de comportamiento absolutamente nazi, que impone una violencia totalmente gratuita", opina, por ejemplo, Eduardo López-Palop, magistrado del Juzgado de lo Penal número 17 de la plaza de Castilla. "Si no se ataja desde el principio, este tipo de movimiento produce una especie de mimetismo que se puede extender como una mancha de aceite. Dentro de la ley, hay que darles caña", subrayó el magistrado.

Los jueces de lo penal consultados -EL PAÌS dialogó ayer con nueve de los 27 que hay en la capital- se muestran, en general, de acuerdo con las instrucciones que ha impartido a sus subordinados el fiscal jefe de Madrid, Mariano Fernández Bermejo.

El fiscal jefe aboga por que los fiscales pidan las penas máximas para los miembros de estas bandas violentas y reclamen a los jueces de guardia o instrucción el encarcelamiento "provisional e incondiciona" de los rapados sobre los que existan indicios claros de haber apaleado a un ciudadano.

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