"Es una temeridad iur en bicicleta por Madrid"
Un modesto y bondadoso madrileño de Torrelaguna (2.500 habitantes, al norte de la región) ha sido proclamado en esta temporada como sucesor de Induráin. Antonio Martín, con 23 años y en su segundo año de profesional, se ha situado entre los mejores ciclistas del mundo tras una brillante actuación en el Tour con el equipo Amaya. En la prueba reina, este discípulo de Javier Mínguez ocupó la décima posición. Antes de alcanzar esta gloria efímera, ha quemado zapatas y cámara durante 12 años por todas las carreteras de la región. Durante ese tiempo tuvo que zigzaguear mientras rodaba por el asfalto para esquivar a los coches. Antonio Martín, como otros profesionales, espera que el éxito deportivo del ciclismo español impulse a las administraciones locales, autonómicas y centrales a proteger a las bicicletas, que tantos accidentes sufren en las calles y carreteras de la región.Pregunta. ¿Sabe que este verano ha sido mortal para los ciclistas en las carreteras de Madrid?
Respuesta. Sí, conozco que ha habido muchos atropellos. Incluso alguno de ellos ha ocurrido cerca de zonas por donde yo he me entrenado en alguna ocasión.
P. ¿ Se ha visto alguna vez involucrado en un accidente?
R. Gracias a Dios, no, pero he estado cerca de caerme varias veces. Un día un coche me echó a la cuneta, pero afortunadamente no ocurrió nada.
P. ¿ Cree, por lo tanto, que es peliroso circular en bici por Madrid?
R. Evidentemente, es muy arriesgado. Considero que es una temeridad entrar y salir de Madrid en bici, porque hay muchas confluencias y cruces que, por supuesto, no están pensados para las dos ruedas. Atravesar los nudos de salida es jugarse la vida. Madrid no está preparada para las bicicletas.
P. ¿Qué recomendaría a los coches si ven una bicicleta cerca?
R. Lo mejor es que si circulan aran velocidad adelanten dejando una distancia amplía. No obstante, hay que recordar que debe haber un respeto mutuo entre la bicicleta y el coche.
P. ¿Qué consejos daría a los ciclistas?
R. Si viven en Madrid, que eviten las salidas; y si pueden, que carguen las bicicletas en coches hasta las afueras. Luego, que elijan carreteras con arcén grande y que vayan con precaución y cuidado, porque a la mínima te pueden tocar.
P. ¿Recomienda el casco?
R. Por supuesto que lo recomiendo, y es obligatorio llevarlo.
P. ¿No es lógico que un país donde está el rey del ciclismo actual no mime a las bicicletas?
R. Es irracional. Habría que hacer campañas en este sentido. Lo ideal sería habilitar carriles bici como los que he visto en Holanda, Alemania y otros países de Europa. Lamentablemente la cultura de algunas ciudades en favor de la bicicleta será difícil trasladarla hasta aquí.
P. ¿Qué carreteras aconseja a los ciclistas?
R. A mí la zona que más me gusta es la sierra pobre de Madrid y la carretera que va desde Torrelaguna a Villalba pasando por Guadalix de la Sierra y Manzanares el Real. Estas vías a diario apenas son transitadas y son ideales para rodar.
P. ¿Y cuál es el puerto más bonito para subirlo en bici?
R. [Duda durante unos instantes la respuesta]. Quizá sea Cotos, por su espectacularidad y su magia.
P. Usted es ahora en Torrelaguna como un dios.
R. Mi pueblo es pequeño y allí todos nos conocemos. Mis triunfos son una alegría para todos. Los vecinos viven mis éxitos como suyos.
P. ¿Qué piensa cuando le nombran como sucesor de Induráin?
R. No quiero pensar en eso, porque creérmelo a estas alturas es perjudicial. Se pueden tomar ejemplos de otros corredores, pero hay que formarse una personalidad propia.
P. ¿Le queda tiempo para divertirse y bailar bakalao? Usted tiene 23 años.
R. No suelo salir mucho. Cuando lo hago me voy pronto y regreso pronto también. Sobre el baile, prefiero el de tranqui, yo la marcha la tengo en otro sitio.
P. ¿Baja mucho a Madrid?
R. Lo justito, no me gusta la ciudad porque siempre está atascada.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.