La muerte reposa en el metro
La estación de metro de Ciudad Lineal fue el lugar elegido ayer por la tragedia. A las 11.15 horas, un tren se detuvo bruscamente en ella. "El servicio se interrumpe unos minutos" anunció la megafonía interior, pero las puertas laterales no se abrieron. Muchos viajeros, nerviosos, se apresuraron a salir por las posteriores. Fue entonces cuando comprobaron que una mujer había sido arrollada.Varios empleados se echaron las vías. Por entre las ruedas, trabajosamente, extrajeron con rapidez su cuerpo. Meneaba la cabeza. Todavía estaba viva. Corrieron por el andén, entre los horrorizados pasajeros, y escaleras arriba para depositarla en un recodo del pasillo, cubierta con unas mantas, a la espera de una llegaron las asistencias, pero ya había muerto. El cadáver permaneció allí hasta que se personó el juez. Posteriormente, la víctima fue identificada como Juana Hervás Martínez, de 59 años.
Varios testigos aseguraron que la mujer se precipitó a la vía por sí misma y alguno especuló con que sufriera un mareo repentino.
