El alcalde de Alcobendas admite que dos de sus hijos han recibido pisos municipales

José Caballero, el alcalde socialista de Alcobendas (82.317 habitantes), admitió ayer que dos de sus cuatro hijos han sido agraciados con sendos pisos municipales, como había denunciado el PP. Pero añadió que todo fue un proceso legal y que quizá cometió "un error" al no ausentarse del pleno que aprobó las adjudicaciones. Sus hijos obtuvieron puntos por vivir, con su padre, en una casa poco digna y el alcalde corroboró el dato: la vivienda familiar tiene 62 metros cuadrados porque su sueldo, de ocho millones brutos -diez, según el PP-, no le da para más.

Cinco días ha tardado el alcalde de Alcobendas en ofrecer en rueda de prensa su versión de lo denunciado por la oposición para admitir los hechos y rechazar cualquier acusación de "irregularidades" en la adjudicación de viviendas municipales aprobada en pleno el pasado julio.Caballero -52 años, 10 de ellos como alcalde de Alcobendas y los cuatro anteriores como primer teniente de alcalde- admitió que sus hijos José Luis Caballero Salmerón, de 24 años, y Yolanda, de 21, obtuvieron sendos pisos municipales en el plan de 800 viviendas para jóvenes puesto en marcha el año pasado.

En la misma rueda de prensa el alcalde de Alcobendas reconoció también que una hermana de la teniente del alcalde Mercedes Jiménez fue agraciada con una de estas viviendas.

El pasado julio, la oposición ya encontró, al revisar los expedientes, la adjudicación de uno de estos pisos a Yolanda Caballero, administrativa que ha estado este verano trabajando con un contrato temporal que finaliza este mes. El viernes pasado, el PP descubría que también había tenido suerte en el sorteo el hermano mayor. Éste también trabaja como administrativo. José Caballero afirmó ayer que no sabía en que empresas estaban empleados sus dos hijos, tan sólo que ella trabaja en Coslada y José Luis en Madrid.

Vivienda deficiente

En el caso de la hija de Caballero, la oposición, cuyo portavoz es el concejal Francisco Extremera, asegura que Yolanda obtuvo un punto más de lo establecido en las bases del concurso, lo que posibilitó la adjudicación de la vivienda. Tampoco se adjuntaba el informe técnico que corroborara que la vivienda familiar era deficiente.Antonio Pérez, concejal de Urbanismo y responsable del proceso, negó que Yolanda Caballero hubiera recibido más puntuación de la debida. "A ella, como a todos, se le dieron 0,05 puntos por cada año que lleva residiendo en el municipio", dijo Pérez.

La participación de José Caballero y de la primera teniente de alcalde en el pleno municipal en el que se aprobaron las adjudicaciones fue calificada por el propio alcalde como "un error", pero a continuación esgrimió un informe elaborado por el secretario municipal para demostrar que su, actuación no ha sido ilegal.

El único punto que no rebatió el alcalde socialista fue la acusación del Partido Popular de haber cometido un agravio comparativo con otra solicitante de vivienda. Ésta última vivía con los nueve miembros de su familia en una casa de 90 metros cuadrados, pero no recibió punto alguno por supuesta vivienda deficiente. Caballero y Pérez alegaron desconocer el caso concreto, pero prometieron revisar el expediente. Los hijos del alcalde recibieron tres puntos cada uno por este concepto. Ambos viven con sus padres y otros dos hermanos en la casa de 62 metros cuadrados.

Para los concejales populares, las irregularidades cometidas son claras, lo que les ha llevado a recusar las adjudicaciones de los tres jóvenes afectados y a tachar al alcalde de "incumplir las leyes de incompatibilidades, otorgar demasiadas prebendas, así como tener demasiado lucro personal y exagerada falta de ética política".

José Caballero, por su parte, afirma que son falsas todas las acusaciones, hechas sin pruebas consistentes y con el único fin de difamarle. Para el alcalde no tiene sentido que dos años después de la adjudicación de las viviendas y después de que el PP aprobara la misma en una comisión de Urbanismo, se lance ahora esta "serpiente de verano". El edil asegura también "no haber participado en ningún momento en el proceso de adjudicación".

Bases del concurso

Más de 2.000 aspirantes presentaron su solicitud el pasado año ante el Ayuntamiento de Alcobendas para optar a uno de los 800 pisos de promoción municipal que el denominado Plan Joven recogía. Se adjudicaron todos en 1991. Serán pisos, en propiedad, de entre 45 y 75 metros cuadrados. Su precio oscila entre los siete y los nueve millones de pesetas, según el tipo de vivienda. Su entrega está prevista para el verano del próximo año.Los requisitos establecidos en las bases de selección eran los de tener entre 18 y 29 años; que los ingresos anuales no excedieran de 1,5 o dos veces el salario mínimo interprofesional dependiendo del tipo de vivienda; no poseer vivienda alguna en propiedad; no haber sido adjudicatario de viviendas de promoción pública; residir en el término municipal de Alcobendas el 31 de diciembre de 1990 y obtener, al menos, el 70% de los ingresos ponderados que se computaban a los efectos de la adjudicación, por rentas del trabajo.

La puntuación que se otorgaba contemplaba diversos aspectos: tener formada una unidad familiar independiente, habitar una vivienda alquilada, que los ingresos de padres o personas con los que convivía el solicitante fuera inferior a 1,5 veces el salario mínimo interprofesional, que su vivienda no reuniera las condiciones mínimas de habitabilidad, por tiempo de residencia y también se puntuaba por cada hijo que tuviera cualquiera de los solicitantes.