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BALONCESTO: NBA

El capitán del Celtics muere de un infarto mientras se entrenaba

Reggie Lewis de 27 años, jugador y capitán de los Celtics de Boston, murió ayer en un hospital de dicha ciudad a consecuencia del fallo cardiaco que sufrió durante una sesión de tiro. La muerte de Lewis ha suscitado una gran polémica en Estados Unidos, ya que hace tres meses le fue diagnosticada una cardiopatía tras padecer un desvanecimiento en un partido de la NBA. El luctuoso hecho conmociona de nuevo el baloncesto profesional estadounidense, que el pasado 7 de junio lloró la pérdida del craota Drazen Petrovic, del New Jersey Nets, víctima de un accidente de tráfico.

Para los Celtics se trata de una tragedia más que añadir a la protagonizada en 1986 por Len Bias, joven promesa que murió por sobredosis de cocaína. "Es un golpe total", declaró Terry Lyons, jefe de prensa de la NBA. "Hemos perdido a un miembro muy apreciado de nuestra familia. Es un momento de inmensa pena", afirmó Dave Gavitt, vicepresidente ejecutivo de los Celtics. "Es la tragedia más grande que he visto. Era un gran muchacho. Mi corazón está roto", agregó Red Auerbach, presidente del club y enfermo del corazón que se encuentra en proceso de recuperación tras una intervención quirúrgica.Lewis, jugador de los Celtics desde 1987 y máximo anotador del equipo en las dos últimas temporadas, sufrió el colapso en la pista de entrenamiento que los Celtics poseen en la Universidad de Brandeis y fue trasladado inconsciente al hospital Waltham-Weston, donde los médicos no pudieron reanirmarlo.

Según testigos, Lewis se sentó repentinamente en la cancha un poco después de las 17.00 horas (11 de la noche hora española) y unos minutos más tarde fue atendido por un amigo y una mujer al darse cuenta de que el jugador tenía problemas con su respiración. Según Joseph McDonald, director de seguridad de la Universidad, la mujer, una estudiante con certificado de enfermera, fue la primera en notar que a Lewis le fallaba el pulso y la respiración.

La mujer intentó reanimarlo inmediatamente, y unos minutos más tarde llegó la ambulancia y la policía, pero Lewis nunca más recuperó el sentido. Fue llevado al hospital de Waltham-Weston a las 17.41 horas, donde los médicos intentaron salvarlo durante dos horas, antes de confirmar su fallecimiento a las 7.30 de la tarde, hora local.

Polémica

El suceso ha acarreado una desagradable polémica. Lewis sufrió un desmayo el pasado mes de abril durante un partido y los médicos del Boston Celties recomendaron su retirada al detectarle una cardiopatía. Sin embargo, el jugador se mantuvo en activo porque su médico personal aseguró que su lesión era nerviosa, no cardíaca, y que, por lo tanto, podía ser controlada con una rigurosa medicación.Además del colapso sufrido en abril, Lewis padeció mareos y náuseas en un partido disputado el pasado 24 de marzo. En vista de ambos sucesos, los Celtics organizaron lo que ellos mismos definieron como un equipo médico de ensueño, compuesto por 11 especialistas en enfermedades cardíacas. Su diagnóstico recogió que Lewis poseía un corazón hipertrófico.

Sin embargo, el jugador y su mujer se mostraron molestos con el club por la publicidad que había recibido su caso y decidieron darse de baja del hospital en el que: le fueron efectuadas las pruebas y acudir a otro centro. El 10 de mayo, el doctor Gilbert Mudge declaró que Lewis poseía "un corazón normal para un deportista" y que sus desvanecimientos eran producto de un mal funcionamiento de su sistema nervioso, que afectaba al ritmo del corazón.

Los médicos de los Celtics decidieron no volver a pronunciarse sobre el tema y el club optó por impedir a Lewis que asistiera a las sesiones de entrenamiento. Cuando murió, Lewis trabajaba por su cuenta.

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