"Españoles, no teman"
Los rostros se suavizaron en el resplandor vacilante que el globo de luz difundía por el recinto, a través de escasas partículas limpias de vidrio...".Pregunta. Al leer este comienzo de su novela La ciudad y los perros imaginé: este señor es todos los diablos...
Respuesta. Sin los diablos, o los demonios, no se puede escribir buena literatura.
P. Quiso ser presidente de Perú, y no hubiese escrito más de triunfar. Pero no lo fue y escribe. ¿Para qué, de veras?
R. Es mi manera de vivir, ya no tengo otra.
P. ¿Qué es un paria?
R. Un hombre sin patria, es decir, libre.
P. ¿Qué es la patria?
R. Para mí, la nostalgia de unos amigos y de paisajes.
P. ¿Quién es el individuo Vargas Llosa?
R. Es un misterio para mí.
P. Ser español ahora, ¿le recordó la primera comunión?
R. Los peruanos también comulgan.
P. ¿Qué tiene de catalán?
R. Mi hija Morgana nació en Sarriá, y Pla, y...
P. ¿Y de chulo madrileño?
R. Mi admiración por las guapas madrileñas.
P. ¿Le bastaría ser par¡siense?
R. Desde niño siempre quiero lo que no tengo.
P. ¿Qué hay entre usted y Londres?
R. La relación del bárbaro que llegó a Roma y se deslumbró.
P. ¿Qué arrastra de Arequipa, su pueblo?
R. La pronunciación perfecta de la elle y mi familia materna, a la que quiero.
P. ¿Sin Lima morirá o vivirá más?
R. Viviré más tranquilo, pero con nostalgia corrosiva.
P. ¿Qué pregunta, de trapos sucios, le haría a García Márquez?
R. ¿De veras te gusta tanto Fidel?
P. Escribiendo, ¿es él más diablo que usted?
R. Es más fantasioso.
P. Supongo que le joroba hablar de García Márquez.
R. Sé que no puedo evitarlo.
P. ¿Tiene algo que escuchar de amor?
R. Todo.
P. ¿Tiene algún entendimiento con el fútbol?
R. No, tengo una pasión.
P. Español ya, ¿se entrenará para llegar a La Moncloa?
R. Españoles, no teman: juro que no.
P. ¿Nacionalizarse es más que algo administrativo?
R. En mi caso fue algo práctico y emotivo.
P. Lo raro es que usted quiso ser presidente y, sin embargo, parece un hombre libre.
R. Gracias a los electores.
P. ¿Es valiente, héroe o cobarde?
R. Sobre todo, un rebelde.
P. ¿Es un neo-Azorín?
R. Soy su devoto, no su seguidor.
P. ¿Por qué no hay sexo en el mundo de Azorín?
R. Creo que el sexo para él no existió.
P. ¿Quién es más guapo, más joven y mejor escritor que usted?
R. Hay miles, y los envidio.
P. Cuando los dichos intelectuales y artistas echan una firma para elegir a un político, ¿sigue pensando bien de los políticos e intelectuales?
R. Ahora pienso mal de ellos hasta que demuestren lo contrario.
P. ¿Qué pasión, amor o locura le desestabiliza?
R. El amor siempre ha sido traumático para mí.
P. ¿Qué artículo suyo evita leer una de sus novelas?
R. Ninguno que yo sepa.
P. ¿Es fetichista porque no le apasiona vivir?
R. El fetichismo es vida.
P. ¿La democracia es compatible con el hambre?
R. Es el mejor camino para salir del hambre.
P. ¿El fulerismo andaluz moderno tiene nombre propio?
R. Escribir novelas es hacer fulerismo, fantasear.
P. ¿Es imposible ser político y no mentir?
R. Me temo que sí.
P. ¿Qué esconde su elegancia?
R. Una inseguridad.
P. ¿Y qué enseña su elegancia?
R. A guardar las formas.
P. ¿Es posible no leer para no dejarse influir?
R. También es posible ser imbécil.
P. ¿Recuerda, en este instante, una frase de la novela que está escribiendo?
R. Un capítulo comienza así: "Y ya van tres desaparecidos, puta madre...".
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