Ensidesa reduce su capital un 73% por las pérdidas acumuladas

La Corporación de la Siderurgia Integral (CSI) mantiene conversaciones avanzadas con grupos bancarios e industriales, fundamentalmente españoles, pero también alguno extranjero, para darles participación en áreas de negocio, divisiones y nuevas instalaciones del grupo, caso de la miniacería de Sestao, y que con tal fin se constituirán en sociedades filiales. Con ello la CSI pretende obtener recursos privados para afrontar la aplicación del plan de viabilidad diseñado, en previsión de que la Comunidad Europea no autorice la totalidad de las ayudas públicas inicialmente previstas, y cuya aprobación fue solicitada por el Gobierno español para financiar dicho plan, cuyo importe asciende a 550.000 millones de pesetas.José Manuel García Hermoso, presidente de la CSI, sociedad titular de las participaciones de control de Ensidesa y Altos Hornos de Vizcaya, aseguró ayer en Oviedo que esta corporación pública (participada al 50% por el INI y por la Dirección General de Patrimonio) pretende "alcanzar el mayor grado posible de privatización". Ensidesa cerró el pasado ejercicio con unas pérdidas de 67.000 millones de pesetas, de los que 40.000 millones corresponden. a pérdidas de explotación, el doble de las registradas un año antes y equivalentes al 27% de la cifra de ventas: 152.000 millones de pesetas. Para 1993 se prevén unas pérdidas sólo "ligeramente inferiores", según García Hermoso. La junta general de accionistas aprobó ayer una reducción de capital por un importe de 91.356 millones de pesetas, equivalente al 73% del nominal para recomponer la situación patrimonial de la compañía. Esta reducción se realiza como consecuencia de las pérdidas acumuladas en los dos últimos ejercicios: 115.000 millones de pesetas.