Escámez manifiesta su deseo de permanecer al frente de CEPSA

El Banco Central Hispano (BCH) ha reforzado su presencia en la Compañía Española de Petróleos (CEPSA), en la que controla el 39% del capital de forma directa. Con la participación indirecta, el control se eleva al 43,1%, según manifestó ayer el presidente de la petrolera y expresidente del banco, Alfonso Escámez. Además, la entidad financiera tiene la representación de otro 9% del capital, con lo que alcanza el 52%. El siguiente accionista importante es el grupo francés Elf Aquitaine.Alfonso Escámez, por otra parte, aseguró que quiere continuar al frente de CEPSA. "No pienso irme", dijo, "le dedico mucha atención a esta empresa y mientras la salud me lo permita seguiré al pie del cañón". Luego bromeó: "No me diga ahora que nombre un delfín". Sobre la posibilidad de que el presidente del BCH, José María Amusátegui, se incorpore al consejo de CEPSA, dijo que no lo creía, aunque manifestó: "Si el quiere le dejo gustosamente la presidencia"

CEPSA, que hoy celebra su junta de accionistas, obtuvo en 1992 unos beneficios de 11.248 millones de pesetas frente a 11.276 millones del año anterior. A pesar de reducir sus beneficios, la empresa repartirá el mismo dividendo que en 199 1, 100 pesetas por acción. Los recursos generados ascendieron a 38.000 millones y la cifra de negocio fue de 521.000 millones.

El año pasado terminó un proceso de inversión de 100.000 millones de pesetas, cuyas actuaciones más importantes fueron la ampliación de la red gasolineras y la construcción de plantas de cogeneración eléctrica con Sevillana (6.000 millones) en Algeciras y con Unelco (6.300 millones) en Canarias. También alcanzó un acuerdo para explotar petróleo y gas en el desierto argelino y otro en Canadá para detergentes biodegradables.