El Gobierno brasileño anuncia un programa económico con severos recortes en el gasto y subida de impuestos
El presidente de Brasil, Itamar Franco y su ministro de Economía, Fernándo Henrique Cardoso, anunciaron ayer un riguroso programa de ajuste económico basado en severos cortes en los gastos del Estado y aumento de la recaudación impositiva, en una nueva tentativa de contener la inflación, que ya llega al 30% mensual. El Gobierno brasileño admite que el déficit de las cuentas públicas es el principal impulsor de la inflación crónica que desde hace una década desalienta las inversiones, desequilibra la economía y dificulta la planificación de largo plazo. Cardoso anunció cortes equivalentes a unos 6.000 millones de dólares (unos, 650.000 millones de pesetas) en los gastos del Estado, poco menos del 10% del presupuesto nacional. Además, el ministro advirtió que desencadenará un combate implacable a la evasión fiscal que, según estiman algunos técnicos, se aproxima al 40% del total de los impuestos directos.El Gobierno brasileño se propone también acelerar el programa de privatización iniciado hace un año y medio por el entonces presidente Fernando Color de Mello, quien a fines del año pasado acabó destituido bajo cargo de corrupción.
El conjunto de medidas anunciado por el Gobierno brasileño constituye el octavo plan antiinflacionario que se aplica en Brasil en los últimos siete años y el segundo en menos de dos meses. Sin embargo, la prensa local y los medios políticos recibieron las medidas con cierto optimismo y coincidieron en que la diferencia está dada por el ministro de Hacienda, un intelectual socialdemócrata de prestigio internacional y uno de los escasos políticos brasileños de reputación intachable.
"El país necesita una dieta presupuestaria basada en la constatación de que los recursos del Estado no son suficientes", diagnosticó Cardoso al anunciar el plan. El mercado local ha ratificado la credibilidad del ministro con una sostenida alza bursátil que se mantiene desde hace tres semanas, cuando Cardoso abandonó la cartera de Relaciones Exteriores para hacerse cargo del Ministerio de Hacienda. En el mismo periodo la cotización de los títulos de la deuda externa brasileña aumentó un 20% en el mercado internacional.
Antes de anunciar el nuevo plan económico, Franco reunió a sus ministros para exhibirles un filme en la cadena ABC sobre el New Deal (Nuevo Trato), el programa aplicado en Estados Unidos en la década de los treinta, por el entonces presidente Franklin Roosevelt. Tras presenciar dramáticas escenas de la Gran Depresión, el mandatario brasileño dijo ante la televisión que otras idénticas forman hoy parte de la vida de las grandes ciudades brasileñas. "Pero saldremos del paso", aseguró.
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