Un duro y muchos románticos

Michael Douglas dijo al diario israelí Yediot Ajronot que "encarnar a un personaje antipático como hago en la película. Falling down (Un día de furia) siempre es peligroso, pero a mi me gusta arriesgarme y provocar". La película, que dirige Joel Schumacher y produce el propio Douglas, cuenta la historia de un norteamericano de la clase media que cae en un circulo de violencia y locura."La violencia es una maldición que se encuentra en nuestros genes", agregó el actor norteamericano, que, según el periodista, es más bajo de lo que parece en sus películas, y en su cabellera peinada hacia atrás aparecen ya las primeras canas elegantes. El actor norteamericano confesó que hace mucho tiempo que intenta hacer una película con su padre, Kirk Douglas, pero "el problema es encontrar un guión bueno con dos papeles adecuados para nosotros. En el momento en que encuentre un guión así, haremos la película", concluyó.-