El Tesoro baja sólo 0,18 puntos las letras para evitar mas presiones sobre la peseta

El Tesoro hizo ayer buenas las previsiones del mercado, con una ligera rebaja en el, tipo de interés de las letras a un año. La subasta se saldó con la adjudicación de 462.457 millones de pesetas -más del doble de lo que vencía- al 10,80%, con una caída de 0,18 puntos respecto a la anterior emisión. Los mercados interbancario, bursátil y de deuda se mantuvieron tranquilos, mientras la peseta ganaba posiciones frente al marco y al dólar, y el presidente del Bundesbank, Helmut Schlesinger, descartaba un rápido abaratamiento del precio del dinero en Alemania.

El Gobierno prefirió ayer ir a lo seguro, tras la experiencia de la semana pasada en la que una reducción excesiva de tipos de interés desencadenó nuevos ataques contra la peseta. El Tesoro se limitó a hacer un gesto, al fijar, el tipo marginal en el 10,80% y adjudicar 462.457 millones, frente a los 205.034 que vencían, lo que supone una rebaja de 0,18 puntos, ligeramente inferior a la prevista el martes por los operadores. De hecho, los inversores hicieron muchas ofertas a un precio inferior, como se deduce del tipo medio fijado, el 10,662% y los cerca de 100.000 millones ofertados de más y que quedaron sin adjudicar.La decisión fue acogida con cautela en el resto de los mercados españoles. El interbancario mantuvo unos tipos similares a los días precedentes, después de que el Banco de España inyectara 702.000 millones de pesetas al 11,75%, ofreciendo nuevamente más dinero del que requería el sistema el último día de la decena. Los tesoreros de los grandes bancos consultados volvían a apostar ayer por el mantenimiento del precio oficial del dinero en el 11,25%, en la subasta decenal de certificados de depósito (CEBEs), cuyos resultados se darán a conocer esta mañana.

El mercado secundario de deuda pública acusó la decisión del Bundesbank (banco central alemán) de mantener el tipo de interés en la subasta de repos (títulos con pacto de recompra) a 14 días en el 7,6%. Los bonos y obligaciones sufrieron un ligero descenso en el precio, aunque no lo suficiente como para que los inversores sigan apostando por una considerable reducción de los tipos en la subasta de hoy de títulos a tres, cinco y diez años.

La previsión es que el Tesoro adjudique los bonos y obligaciones un punto y medio por debajo de la última emisión, en la que se vendieron los títulos a tres años al 11,978%, a cinco años al 11,763% y a diez años al 11,554%.

Inversión extranjera

Precisamente ayer se dió a conocer el último saldo de deuda pública en manos de extranjeros, que batió el pasado viernes un nuevo récord histórico. Según el Banco de España, la inversión de no residentes en títulos oficiales supera ya los 3,21 billones de pesetas, con un aumento de 73.505 millones en la última semana. Más del 95% de esta cantidad está invertida en bonos y obligaciones a largo plazo. En los cinco primeros meses del año, el saldo de extranjeros en deuda pública se ha incrementado un 74%, tras la caída de finales de 1992 que llevó a cerrar el ejercicio con 1,84 billones de inversión extranjera en este mercado.

Todas estas noticias influyeron positivamente sobre la peseta, que ganó ayer posiciones frente al marco alemán y el dólar estadounidense. Nada más abrirse la sesión, la moneda española se apreció frente a la mayoría de las divisas del Sistema Monetario Europeo (SME), en una clara muestra de que los inversores están deshaciendo posiciones contra la peseta. La situación varió a media jornada, con ligeras pérdidas de la peseta, fijándose al final un cambio de 78,55 pesetas por marco (79,155 el martes) y 125,25 pesetas por dólar (125.698 la sesión precedente).

Fuentes del mercado informaron que el Banco de España pudo ayer volver a comprar marcos, para rehacer su maltrecha cartera de divisas tras la sangría de la primera decena de mayo. Fuentes oficiales no quisieron confirmar este extremo, ni facilitar información sobre el nivel de reservas a final de mayo, que se hará público en los próximos días. Desde que comenzó la tormenta monetaria hasta la actualidad, se han perdido cerca de dos tercios de las reservas exteriores en defensa de la peseta.

En ese clima de tranquilidad, el presidente del Bundesbank, Helmut Schlesinger, descartó ayer una rápida bajada de tipos de interés en Alemania. En una intervención ante banqueros, Schlesinger afirmó que el banco central alemán no podía hacer frente a un nuevo abaratamiento del precio del dinero mientras se mantengan los actuales niveles de crecimiento de la masa monetaria, la inflación y el déficit público.