Profesionalizar el Ejército costaría 800.000 millones, según un estudio del PP
La profesionalización total de las Fuerzas Armadas, y la consecuente supresión del servicio militar, en el plazo de diez años, costaría 809.500 millones de pesetas de 1992, según un estudio encargado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales, que preside el líder del Partido Popular, José María Aznar. El estudio, realizado por el Grupo de Estudios Estratégicos (Ges), institución de carácter privado, propone una amplia reforma de las Fuerzas Armadas, que afecta a la organización y dimensiones del Ministerio de Defensa yde los tres ejércitos, al tiempo que resta compentencias al Cesid, el servicio militar de inteligencia.
El estudio del Ges es uno de los informes sectoriales que maneja el PP para preparar su gestión de gobierno si gana las próximas elecciones. Según dicho estudio, la profesionalización de la mitad de la tropa y marinena, pasando de 22.500 a 50.000 soldados profesionales e incrementando sus retribuciones desde 900.000 hasta 1.300.000 pesetas de 1992 al año, costaría 215.500 millones de pesetas para el periodo 1993-97.Si una vez alcanzado este objetivo, que es el único que se plantea actualmente el PP, se decidiera profesionálizar totalmente el Ejército, habría que doblar los soldados profesionales, llegando a 100.000 en el 2002. Está decisión, acompañada de un incremento de sus retribuciones hasta 1.500.000 pesetas de 1992 al año, costaría 594.000 millones en el periodo 1997-2002.Los autores del informe advierten que este objetivo no puede lograrse sin un paralelo incremento de los gastos de Defensa. Aunque tanto el PP como el PSOE abogan por destinar al presupuesto de Defensa el 2% del PIB, frente al 1,2% actual, el estudio propone llegar a este límite en el año 2001. Al final de la próxima legislatura debe alcanzarse el 1,60% del PIB, equivalente a un billón de pesetas de este año.
Efectivos totales
Los efectivos totales de las Fuerzas Armadas, según el Ges, deben situarse en 160.000, 20.000 menos de los previstos por el Gobierno. En cambio, los cuadros de mando deben ser 53.000, 3.000 más que los incluidos en la Ley de Plantillas recientemente enviada a las Cortes y paralizada por la convocatoria electoral. El estudio plantea reducir en 25 los generales (250) y aumentar en 4.000 los suboficiales (33.000).El órgano central del ministerio es el que sufriría mayores recortes. Según la propuesta, desparecería una de las dos secretarías de Estado y cuatro de las nueve direcciones generales (Servicio Militar, Enseñanza, Servicios y Relaciones Informativas). Las competencias en materia de defensa del centro de espinaje Cesid, que en la actualidad dirige el general Emilio Alonso Manglano, pasarían a un nuevo servicio de inteligencia militar, dependiente del jefe del Estado Mayor de la Defensa, en el que se integrarían también las divisiones de inteligencia de los tres ejércitos.
Del Jemad, máximo cargo de carácter militar, pasarían a depender los denominados cuerpos comunes (como Sanidad o Jurídico), actualmente dependientes del secretario de Estado de Administración Militar, que es un civil. La pérdida de peso del órgano central del Ministerio en relación con los ejércitos se reflejaría en su menor dotación económica: en el año 2.000 debe absorver menos del 10% de los recursos para material.
En concordancia con el Plan Norte de reorganización del Ejército de Tierra, en elaboración, el informe propone suprimir las capitanías generales, los gobiernos militares y las divisiones. Sin embargo, va más allá que aquel al reducir a sólo 10 el número de brigadas, frente a las 15 actuales y a las 14 de la última versión del Plan Norte.
Respecto a la intervención del Ejército español en el extranjero, el estudio afirma: "La única justificación posible para el empleo de nuestros hombres será el interés nacional y nuestra seguridad. Donde no haya intereses estratégicos, ampliamente entendidos, España se abstendrá de actuar o participar de manera directa con sus efectivos militares".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.