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La cólera del padre

El violento progenitor de Mary Pierce, expulsado de Roland Garros

La acreditación de Jim Pierce, el padre de la tenista francesa Mary Pierce, descansa en algún contenedor de la Porte d'Auteuil por su mal comportamiento en el partido entre su hija y la estadounidense Kimberly Po. Diez agentes fueron necesarios para expulsar al colérico progenitor. ¿Noticia? No. Pierce tiene un nutrido historial delictivo y su hija ha sido a veces, su rival en una pelea. Con un padre así, ¿quién necesita enemigos?

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"Sólo le he gritado que golpeara más fuerte la bola", argumentó Jim Pierce en su defensa. Georgina Clarke, la supervisora de la Asociación de Mujeres Tenistas (WTA), debió de pensar otra cosa cuando envió un comando de guardaespaldas para expulsar al alborotador. "Son muy valientes en grupo. Fíjense en ese gigantón. Me ha molido a patadas", protestó el padre poco antes de serle retirada de forma definitiva su acreditación. Su hija, de 18 años y que había perdido el primer set, encajó con alivio la expulsión: ganó las otras dos mangas y se clasificó para los octavos de final.En la decisión adoptada por la organización pesaron los antecedentes de Jim Pierce. En 1991 perdió los nervios por una derrota y lanzó a su hija una bolsa cuando abandonaba la pista. Más tarde le propinó una sobe rana paliza. El pasado año se lió a golpes con un par de espectadores que, educadamente, le habían pedido que dejara de insultar a la niña. Las salidas de tono de Pierce, famosas ya cuando la chica era tina menuda jugadora junior en Florida, motivaron en la WTA la redacción de un regla mento denominado De conducta deshonrosa e impropia.

Las sanciones y los continuos incidentes, con amenazas incluidas hacia aquellas jugadoras que se atrevieran a derrotar a Mary, suscitaron el interés de los medios de comunicación, que encontraron en Pierce un pájaro de cuidado con una biografía plagada de líos con la justicia.

El verdadero nombre de Pierce es Bobby Glenn Pearce, según informa Clensom Smith. Nació en Greensboro (Carolina del Norte). Sus primeros pasos fueron los de un delincuente juvenil a pesar de la educación baptista que recibió. En el octavo año abandonó la escuela. En 1954 ingresó en los Marines, cuerpo del que fue expulsado 18 meses después. En Nueva York, en el decenio de los 60, siguió su carrera delictiva, ya con nombre falso. Un atraco con navaja le costó un tiro en la espalda por parte de la policía y cuatro años en las prisiones de Nueva York y Carolina del Norte. En ese tiempo se le atribuyeron síntomas de esquizofrenia y paranoia. En 1964 recuperó la libertad y vivió 10 años como un vagabundo. Un turbio asunto le obligó a huir a Montreal, donde se casó con Yannick Adjadj, una francesa con la que tuvo en 1975 a Mary.

En 1984 saldó sus cuentas con la justicia norteamericana y encauzó su vida en el tenis de su hija, que juega bajo la nacionalidad de su madre. Desde entonces, los incidentes se han limitado a los clubes de tenis. Nick Bollettieri, famoso forjador de figuras como la serbia Mónica Seles o el norteamericano André Agassi, expulsó a la joven de su escuela para evitar acabar a tortas con el padre. El problema llegó a oídos de la WTA, que decidió tomar cartas. El último conflicto, producido el viernes en la pista 11 de Roland Garros, acabó con Pierce puesto de patitas en la calle. Su hija prefirió no comentar el tema. Está acostumbrada: "No me gusta que me tengan lástima. Sé como tratarle".

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