Primera mujer investida obispo en la Iglesia noruega

Rosemarie Kohn, de 53 años, será investida la primera mujer obispo de la Iglesia noruega (luterana) y la tercera en el mundo que alcanza esta dignidad. El acontecimiento histórico en el país nórdico tendrá lugar el próximo jueves, día 20. La decisión ha estado precedida de una encendida polémica por la resistencia de las fuerzas conservadoras, dentro de la Iglesia y de la sociedad noruega, que han cuestionado este nombramiento. Las razones visibles de esa oposición son los puntos de vista tolerantes y humanos defendidos por la nueva obispo sobre temas tan sensibles como el aborto, la homosexualidad, las formas de convivencia de la pareja y aun la economía liberal.Rosemarie Kohn es comprensiva con sus detractores, pero no está dispuesta a transacciones de principios. "Yo sé que todo lo nuevo es causa de discrepancias y conflictos pero una debe tener la voluntad de soportar esta carga cuando lucha por algo que vale la pena", ha dicho, pero también: "Nunca venderé mi alma por un obispado".

Detrás de cuestiones de principios hay también una razón menos explícita: el acceso de una mujer a una situación de poder, espiritual en este caso, a un ámbito tradicionalmente dominado por los hombres. En este aspecto su designación es un paso más, importante, en la larga lucha por la igualdad de los sexos.

Prácticamente todos los obispos noruegos se oponían a su designación y alguno llegó a pronosticar un cisma profundo de la Iglesia si el nombramiento se concretaba. Probablemente nunca en la historia del país una lista de candidatos haya sido tan minuciosamente analizada y, tras pasar diversas instancias, llegó finalmente al Ministerio de Educación y Asuntos Eclesiásticos para el veredicto final: "La hora ha llegado, la oportunidad está aquí y la decisión se ha tomado", fueron las palabras de la ministra Gudmund Hernes, que pusieron punto final al diferendo, aunque la polémica probablemente seguirá.

En 1969, Rosemarie, que emigró desde la Alemania nazi con su madre noruega cuando tenía siete años, fue designada sacerdote de la Iglesia noruega y desde 1989 es rector de la Facultad de Teología Práctica de la Universidad de Oslo.

Sobre el tema del aborto la nueva obispo ha manifestado: "Yo estoy en principio contra el aborto y pienso que siempre es una tragedia, pero estoy de acuerdo con la legislación actual de que sea la mujer quien decida sobre este asunto". Por eso se abstuvo en la condena que hizo la Iglesia en 1978 de la ley que dio a la mujer el derecho exclusivo de adoptar esa decisión.

Tampoco se sumó a las condenas a una ley reciente que dio a los homosexuales la posibilidad de legalizar una relación similar a la de un matrimonio común. De una sola cosa dice estar bastante segura y es de haber aprendido a discriminar entre lo que realmente es importante en la vida y lo intrascendente. -