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Aznar afirma que González se esconde "debajo de la mesa" tras la devaluación

El líder del IPP, José María Aznar, acusó ayer en Pamplona a Felipe González de esconderse "debajo de la mesa" y no dar la cara ante los españoles desde el jueves negro de la ecomía, en que la peseta fue devaluada por tercera vez desde septiembre. Según Aznar, González elude su' responsabilidad como presidente del Gobierno e intenta unir el futuro de España a su propio destino. "No estoy dispuesto a aceptar eso", señaló ante más de 3.000 personas en Pamplona.

Aznar recordó que la divisa española se ha. devaluado ocho veces en los últimos 34 años. "Cuatro le corresponden al señor González. No hay gobernante en la historia de España con tal sucesión de fracasos económicos. Y todavía dicen que el Gobierno ha tenido el coraje de devaluar, cuando nos ha costado cinco billones de pesetas". Aznar replicó contundentemente a las reiteradas manifestaciones de los socialistas sobre el coraje del Gobierno: "Que se metan el coraje donde puedan".También consideró absurdo que los socialistas pidan una nueva mayoría "cuando han tenido una mayoría absoluta que no ha servido. para afrontar los problemas ni para solucionarlos".

Aznar hizo suya la inquietud por la estabilidad política y económica tras los resultados del 6 de junio que los socialistas han expresado durante la precampaña. "Apostar por el socialismo es garantía de inestabilidad", dijo. "Si con mayoría absoluta no han logrado sacar adelante sus propios proyectos de ley, ahora hay que preguntarse a quién se vota. ¿A los guerristas? ¿A los renovadores de la nada? ¿A quien viene por aquí como candidato? [el ministro de Economía, Carlos Solchaga]".

Por qué creer ahora, se preguntó, que con los votos del 6 de junio un Gobierno socialista va a escoger un fiscal general del Estado independiente "y que además sepa algo de leyes y de derecho". "González tiene que saber", agregó, "que el verdadero rostro del PSOE son los 3.300.000 parados y las más de 750.000 pesetas que debe cada española, sea grande o chico. Su verdadero rostro es la última devaluación".

Después de decir que no está dispuesto a que González encadene el futuro del país a su interés y a su prestigio personales, o a que "no dé la cara y se meta debajo de la mesa" cuando se suceden las noticias económicas negativas, subrayó: "Yo no acepto con resignación ni con benevolencia un proceso de deterioro moral y económico de mi país como el que se está produciendo".

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