Tráfico de ideas
Sólo 'Un, dos, tres...' y algunos programas de Gestmusic han conseguido exportarse a otros países
La mayoría de los espacios de entretenimiento que se emiten actualmente en las cadenas de televisión españolas son versiones más o menos literales de espacios que han probado su éxito en otros países. El precio justo, Código Uno, Misterios sin resolver e Inocente, inocente son algunos ejemplos. Muy pocos programas se basan en ideas originales españolas, y prácticamente sólo Un, dos, tres... y algunos de los espacios realizados por Gestmusic han conseguido que se les imite en otros países.
El concurso-espectáculo Un, dos, tres..., que dirige Narciso Ibáñez Serrador, es el más veterano de todas las cadenas. Además de su éxito en España -el pasado 17 de abril cumplió 21 años-, hasta el momento se han realizado versiones del programa en Holanda (desde 1973 en una primera etapa y a partir de 1976 producido por Joop van den Ende), Reino Unido (1979), Portugal (1980) y Alemania (1983), cuya señal llega además a los países limítrofes."La mejor versión, sin duda, es la holandesa", afirma Ibáñez Serrador. "Es la más espectacular e impactante, y fueron los primeros que entendieron que el Un, dos, tres... no es simplemente un concurso, sino un show, un gran espectáculo cuya columna vertebral es un concurso. El éxito de audiencia en Holanda fue la gran campaña de expansión a otros países". La adaptación portuguesa es casi literal al programa español, aunque con menos medios de producción, y la alemana es similar a la de Holanda e incluso se realiza en el mismo plató. La versión inglesa es más austera en los premios y tiene una menor duración.
Gestmusic, la productora de Josep Maria Mainat, Miquel Ángel Pascual y Toni Cruz -componentes de La Trinca-, forma parte de Action Group, una asociación de productoras independientes, en su mayor parte europeas, que posee en exclusiva los derechos de sus programas. De los espacios que La Trinca tiene actualmente en emisión son ideas originales propias No te rías, que es peor y Sin vergüenza, de TVE, y Olé tus vídeos, de los canales autonómicos.
Adaptación
El formato de Luna de miel (autonómicas) es de producción holandesa y el de Amor a primera vista (concurso emitido también en las autonómicas) es británico. "De todas maneras, cuando trabajamos con un formato de otro país lo adaptamos muchísimo al gusto y las apetencias de la audiencia española", afirma Josep Maria Mainat.Sin vergüenza, que tiene una duración de media hora, ha estrenado una versión en Argentina y próximamente se ofrece rá en Alemania; No te rías, que espeor, también de media hora, se ha exportado a Holanda y Alemania, y Olé tus vídeos, tras una versión realizada en la BBC la pasada temporada, se emite actualmente en Alemania y Austria, y en Suecia se prepara también una nueva versión del programa.
Para Narciso Ibáñez Serrador, la causa de que no se emitan en la actualidad más programas con ideas originales españolas se debe a "la desconfianza hacia las ideas propias, lo cual no me parece bien, y a la confianza respecto a que un éxito de fuera pueda tener también éxito aquí, lo que no deja de tener su razón, aunque creo que se deberían probar más fórmulas e ideas".
Josep Maria Mainat reparte al menos una parte de la culpa entre las propias productoras y las cadenas de televisión: "Lo que ocurre es que hay muchos programas muy buenos circulando por el mundo, y si tienes acceso a esos formatos y posibilidad de adaptarlos, no sólo resulta mucho más fácil de hacer ese producto, sino también de venderlo que si sólo se trata de un proyecto sobre el papel, porque puedes ver el producto terminado y los resultados de audiencia. Y por otra parte, las cadenas arriesgan poco, hay una falta de confianza en los canales de televisión a la hora de producir programas que sean estrenos mundiales, por la misma razón".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.