_
_
_
_

Diputado,una profesión peligrosa

Pilar Bonet

A pesar de ser tranquilo, flemático y poco amante de hablar en público, Alexándr Golíshnikov ejerce una profesión arriesgada: es diputado del Congreso de Rusia. El lunes, apareció ante la Cámara con la cabeza envuelta en una venda. A las once de la noche del día anterior, al abandonar el Kremlin, recibió un bolsazo en pleno cráneo. El agresor fue uno de los muchos ciudadanos reunidos junto al Kremin para aclamar a Yeltsin y presionar a los diputados. Estos fueron insultados mientras recorrían los 100 metros que separan el Kremlin del hotel Rusia, donde se alojan la mayoría de los legisladores de provincias.Fue sólo un aviso de la violencia que se gesta en una sociedad cada vez más polarizada. Como si hubieran superado las inhibiciones causadas por el temor a una repetición del estalinismo, ambas partes usan una terminología inquietante.

La Asociación de Electores de Rusia ha pedido al presidente Yeltsin que interne al vicepresidente Alexandr Rutskói, al jefe del Parlamento, Ruslán Jasbulátov, al presidente del Tribunal Constitucional, Vital¡ Zorkin, al fiscal General, Valentín Stepankov, al secretario del Consejo de Estado, Yuri Skokov y varios funcionarios más. Según esta asociación propresidencial, deben ser juzgados por "incitar al derrocamiento violento del presidente elegido por el pueblo y promover la guerra civil".

A la terminología de combate ha recurrido el diputado Nikolai Pávlov, miembro de la oposición patriótica, que ha calificado al presidente y a sus colegas de Bielorusia y Ucranla de "troika de Caínes que deberían haber sido fusilados" cuando liquidaron la URSS en 1991. Los ejemplares de Narodnaia Pravda en los que venían estas declaraciones se apilaban en el Congreso.

El diario Den publica una foto de los prisioneros alemanes desfilando por Moscú en 1944 con el texto: "Así irán los demócratas". Una de las octavillas publicadas por Rusia Democrática, decorada con viñetas de gentes armadas y prisioneros con trajes de rayas, lleva la siguiente inscripción: "El Congreso empuja a Rusia a la Guerra Civil..."

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_