Los mercados recuperan los problemas internos
La crisis política rusa empieza a perder peso en los círculos económicos occidentales, lo que ha devuelto la capacidad de maniobra a unos mercados cuyas valoraciones se disipan en un frente múltiple.En Wall Street se han tomado en consideración los datos económicos, aunque en medio de un gran escepticismo por parte de algunos analistas. Los pedidos de bienes duraderos subieron un 2,2%, pero la dificultad de la lectura llega al restarse el componente de defensa, sin el que el avance queda en el 4,1%.
La posible doble interpretación de este dato coincide con algunas recomendaciones de reducir el riesgo de las carteras, lo que supone bajar la participación en renta variable hasta el 30% en lugar del 50% actual. La causa de esta forma de pensar está en los índices bursátiles, demasiado altos para la situación económica y, por tanto, sobrecargados de riesgo. El Dow Jones se orientó al alza al comienzo de la sesión. Sin embargo, después cayó 16,48 puntos al cierre.
En Europa tan sólo hubo reacciones a los movimientos anteriores, esto es, ligeras correcciones a algunos excesos favorecidos por el mal ambiente económico. Y ello a pesar de que el Bundesbank dio alguna señal de un nueve, descenso de tipos.
El tema ruso ha pasado a un segundo lugar al suavizarse la situación por la renuncia del presidente a los poderes especiales, lo que ha obligado a Londres a centrarse en los resultados empresariales y ceder un 0,02%, mientras que París espera la segunda vuelta de las votaciones con un avance del 0,12% y el mercado de Francfort consigue subir un 0,67%. La Bolsa japonesa se anotaba un nuevo recorte de 40 yenes que los operadores achacaron a la retirada de beneficios.
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