España registra la mayor pérdida de empleo de la CE en los últimos 12 meses

La Comunidad Europea alcanzó en enero de 1993 un 10% de desempleo, un 0,1% más que en diciembre y un 0,9% más que un año antes, según cifras publicadas ayer por laagencia estadística comunitaria Eurostat. España es el país comunitario con mayor velocidad de pérdida de empleos: 0,4% en el último mes y 2,9% en el último año; es decir, una velocidad de crucero superior al0,2% mensual. La mano de obra masculina es la más afectada, pero las mujeres españolas menores de 25 años son el grupo más golpeado por el paro de toda la CE, con una cifra que supera el 40%.

La pérdida de empleo que ocasiona la actual recesión económica experimenta su acelera ción máxima en España, donde la CE registra de diciembre de 1992 a enero de 1993 un 0,4% de crecimiento del paro, el doble de la pérdida experimentada en el segundo país peor situado en destrucción de puestos de trabajo, que es Bélgica (0,2%), y cuatro veces más que en Irlanda, Alemania y Portugal (0,1 %). El fenómeno se extiende a lo largo de los últimos doce meses (enero de 1992 a enero de 1993): La máxima pérdida de puestos de trabajo se registra en España, con el 2,9%, seguida de Irlanda (1,4), Reino Unido (1,3) y Bélgica (1,0). Italia -donde ayer tres grandes centrales sindicales con vocaban una huelga general, para el 2 de abril, en defensa del empleo- es el único país en el que se produce una tendencia contraria: el desempleo disminuye un 0, 1 % de diciembre a enero y un 0,41/o de enero a enero.

Luxemburgo sigue en cabeza en empleo, con un 2% de paro, que significa un crecimiento del 0,3% respecto a enero de 1993 y un descenso de un 0,1% con re lación al mes anterior. España se halla en la cola, con un 19,9%, con Irlanda pisándole los talones (18.4%). Estas cifras se han calculado tras corregir las variaciones estacionales. Las cifras en bruto dan resultados todavía peores: un 20,2% de paro en España, 0,5% más que en- diciembre y un 3,0% más que hace un año.

La pérdida de empleo en Es paña golpea con mayor fuerza a la mano de obra masculina que a la femenina, característica que se localiza, sin tanta virulencia, en otros países como Dinamarca, Alemania, Francia y Holanda, y en las mismas cifras globales comunitarias. De enero a enero, el paro masculino aumentó un 3,4%, y el femenino el 2,2%, y de diciembre a enero, 0,5% y 0,2%, respectivamente. En el conjunto de la CE se percibe la misma tendencia: 1,0% de aumento en el paro masculino por un 0,6% en el femenino en los últimos doce meses, y un 0,1% y un 0,0% en el último mes, respectivamente.

El grupo social más duramente afectado por el paro en toda la CE es el formado por las mujeres españolas menores de 25 años, que alcanzan la cifra del 40,3%, con una progresión de 2,6% respecto a, enero de 1992 y de 0,6% respecto a diciembre de 1992.

En términos absolutos estimados por el promedio anual de personas desempleadas, España se sitúa en el segundo lugar de la CE, con 2.774.000 parados, detrás del Reino Unido, con 3.170.000, y a escasa distancia de Francia (2.468 millones) y de Italia (2.427.000). Estos cuatro países concentran el 77% de los parados comunitarios, que se cifran en 14.077.000 en 1992, aunque las previsiones de la Comisión consideran que llegarán a 17 millones en 1993. Si se desglosa la cifra de mano de obra femenina desempleada, España se sitúa en cabeza, con 1.391.000 desempleadas, por encima de Italia (1.383.000).

El paro por regiones

La estadística regionalizada del desempleo en la CE, publicada recientemente por Eurostat (el 5 de febrero), corresponde a los doce meses entre abril de 1991 y abril de 1992 y registra tendencias muy similares. Las regiones con mayor velocidad de pérdida de empleo son La Rioja (3,8%), Gran Londres (3,2%) y Galicia (2,8%).

Extremadura y Andalucía son las que tienen mayor paro comunitario (26,3% y 27%), con un crecimiento sostenido del 1,9% y del 2,1%. Lejos y a distancia se hallan tres regiones meridionales italianas: Campania, Basilicata y Sicilia (21,3%, 21,8% y 21,8%, respectivamente), donde el crecimiento del desempleo es menor o negativo (0,5%,1,8% y -0,1%). Ninguna región española queda fuera de la barra del 10%, tras este último registro estadístico. En abril de 1991, Rioja, Aragón y Baleares todavía estaban por debajo de los dos dígitos.