El duque de Feria ingresa en la enfermería de la cárcel para impedir que se lesione

Rafael Medina Fernández de Córdoba, duque de Feria, permanece ingresado desde la tarde del sábado en la enfermería de la prisión Sevilla-1 para evitar que pueda atentar contra su vida, según el parte médico penitenciario. El duque está acusado del rapto de una niña de cinco años y de un delito contra la salud pública.

Rafael Medina sufría ayer el síndrome de abstinencia por lo que tuvo que recibir tratamiento médico. El duque de Feria permanecerá al menos siete días en la enfermería, para su adaptación al régimen penitenciario y para que no se autolesione, según fuentes de la prisión. De allí, si se mantiene su situación carcelaria, será ingresado en el módulo 2 de la cárcel sevillana, donde se encuentran los presos "no conflictivos", y en el que compartirá celda con otro recluso.Según fuentes de la vieja penitenciaría sevillana, el duque de Feria recibió a su llegada al centro, procedente de los calabozos del juzgado de guardia, el trato ordinario que reciben todos los internos. Tras pasar reconocimiento sanitario y ducharse, Rafael Medina tuvo- que dejar en depósito los objetos personales que no están autorizados en el interior de la cárcel, entre los que se hallaban varios talonarios de cheques, tarjetas de crédito y dos corbatas. Durante el día de ayer, Rafael Medina no recibió visitas, ya que los domingos no hay actividades en la prisión.

El auto de prisión dictado contra Rafael Medina por la juez María de la Oliva Morillo Ballesteros incluye, además del delito de rapto, otro contra la salud pública -tráfico de drogas- El delito de rapto, tipificado en el artículo 440 del Código Penal, establece para sus autores la pena de seis años y un día a 12 años de prisión mayor.

En la misma prisión sevillana, aunque en dependencias distintas, cumple condena por tráfico de estupefacientes Juan Bell Saltares, padre de la niña de cinco anos por cuyo rapto fueron encearcelados el duque de Feria y otras tres mujeres: Sandra Álvarez Bautista, Mercedes Almeida e Isabel Saltares Soto. Bell Saltares ha estado penado con anterioridad en otras prisiones españolas, entre ellas la de Badajoz, y se encuentra en el departamento celular número 1 del centro penitenciario de Sevilla.