¿Una Liga histórica?

El Deportivo de La Coruña se ha empeñado en hacer historia. Cincuenta y tres de las 61 ediciones precedentes de la Liga se las repartieron cuatro equipos: el Real Madrid, 25; el Barcelona, 12; el Atlético de Madrid, ocho, y el Athletic de Bilbao, ocho. En la actual, sin embargo, el Deportivo está resistiendo todos los acosos y ha alcanzado la calificación de campeón de invierno, aunque, eso sí, con la facilidad de que el Barcelona tenga aplazado uno de sus partidos. Otro aspecto destacado es el incremento de los goles en un 12,04% respecto a la temporada pasada.

El Valencia, en 1942, 1944, 1947 y 1971; la Real Sociedad, en 1981 y 1982; el Betis, en 1935, y el Sevilla, en 1946, son los únicos conjuntos que pudieron romper en unos momentos dados la hegemonía de los cuatro tradicionalmente más poderosos en el fútbol español. El Deportivo trata de emularles en 1993. Su liderato no sólo no ha sido efímero, sino que le ha llevado hasta su nombramiento honorífico como campeón de invierno. Es cierto que el Barcelona, de haber vencido al Oviedo en el encuentro que aplazó con motivo de su disputa de la Copa Intercontinental, le habría privado de él. Pero este detalle no resta mérito alguno a Arsenio Iglesias y sus jugadores, que apenas han perdido dos (Tenerife y Atlético de Madrid) y que, como demostraron el sábado con su empate en el descuento frente al Rayo Vallecano incluso cuentan ya con la suerte de los campeones.Del primer cuarto de la competición (diez jornadas) al segundo (nueve) se han producido diversas variaciones absolutas y relativas. Entre las primeras puede apreciarse, que, mientras el Deportivo ha dominado ambos periodos (16, y 14 puntos), el Real Madrid ha descendido en las clasificaciones parciales del segundo puesto (15) al quinto (12) y el Atlético, cuya crisis es galopante, del cuarto (14) al 13º (7). Entre las segundas, que sólo un cuadro, el Burgos, se ha venido precisamente tan abajo como el rojiblanco en comparación con su trayectoria anterior: Luis Aragonés y los suyos han contabilizado, en efecto, el 50% de los puntos totalizados en la fase inicial.

En este sentido, hay que destacar el auge del Tenerife, que ha ganado un 175% más (14 ahora por 8 antes). Los otros bloques que se han superado, lo que no obsta para que algunos continúen ocupando posiciones comprometedoras en la categoría, son el Rayo (13 7,5%), el Albacete (13 3,3%), el Valencia (118, 1 %) y el Español (111, 1 %). Desde la perspectiva opuesta, al margen del Atlético y el Burgos, los que más han decaído son el Logroñés (66,6%), el Celta de Vigo (60%) y el Sporting de Gijón (58,3%).De 440 tantos a 493

El promedio de goles por partido ha decrecido de forma ligera en el segundo cuarto en relación con el primero: 2,57 por 2,64. Pese a este detalle, la progresión rematadora en lo que va de campaña ha sido significativa con referencia a la precedente: 493 por 440 0, lo que es igual, un 12,04% más.

En coincidencia con los estudios realizados por los, centros estadísticos en las Ligas de otros países, las modificaciones del reglamento, como la imposibilidad de que los porteros cojan el balón con las manos en las cesiones de sus compañeros con los pies y la expulsión de quien derribe a un contrario siendo el último defensor, han contribuido a que el rey del espectáculo reine más.

También los penaltis han influido en el aumento goleador. Aunque con más lentitud de la deseable, se antoja que los árbitros tienden a desembarazarse de sus temores a las áreas y, en consecuencia, señalan cada vez más hacia el redondel fatídico. Si en la temporada anterior habían registrado 51 a estas alturas, en la vigente ya llevan 57 (+ 11,76%). Por añadidura, el acierto de los especialistas en estos lanzamientos es mayor: del 78,43% de ayer al 91,22% de hoy.

El cuidado con el que se preparan las ejecuciones de las faltas y los saques de esquina y banda repercute asimismo en que la rentabilidad de las jugadas a balón parado sea superior. Si los máximos castigos han generado 52 dianas, los golpes francos han ocasionado 44; los córneres, 27, y las acciones desde las bandas, 4. Como hasta se produjo una a renglón seguido de la puesta del esférico en juego por parte de un guardameta, los goles creados así son 128, o sea el 25,96% de los totales.

Las victorias en campos ajenos se han estabilizado de un ejercicio a otro: de 47 a 48 (+ 2,12%). También se sostiene el hecho de que el que marca primero casi se asegura el triunfo: el 68,75% de las veces gana y el 7,95% pierde.