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Los actores se encierran en el Alfil contra Matanzo

Los cómicos, a través de la Unión de Actores, y numerosos políticos se han solidarizado con el teatro Alfil, adonde acudirán hoy en masa a las 9.30, a la representación de Cabaret castizo. La dirección del Alfil ha optado por un encierro) indefinido hasta que se resuelva la situación de manera definitiva, al que se han sumado caras famosas. El Ayuntamiento ha decidido aplazar cualquier acto administrativo hasta que el secretario general analice el expediente que la Junta Municipal de Centro ha tramitado contra el teatro Alfil. Por su parte, Matanzo declaró ayer que tiene previsto contratar a la compañía que le caricaturiza para que hagan una 'representación en su distrito: "Es muy bonito que a uno le imiten".

Además de numerosos actores, muchos de ellos famosos, han confirmado su asistencia a la representación matinal de hoy representantes de los gobiernos central y regional, además de Pedro Ortiz, concejal del Cultura del Ayuntamiento.Este diario confirmó ayer que el Gobierno municipal ha decidido aplazar cualquier acto administrativo hasta que el secretario general -el máximo funcionario municipal que vela por la legalidad de los acuerdos- analice el expediente que la Junta Municipal de Centro, a través de su secretario, Enrique Mezquita, ha tramitado contra el teatro Alfil. Pero la dirección del Alfil ha decidido iniciar por la mañana un encierro indefinido, al que muchos actores han confirmado su participación, hasta que la situación se resuelva de manera definitiva.

Francisco Herrera, portavoz de IU en el Ayuntamiento, comentó ayer que el conflicto del Alfil es la expresión de cómo el PP ha convertido Madrid en Yugoslavia: "El PP en el Ayuntamiento está dividido en tribus, y sus guerras las pagan gentes como el Alfil". Herrera piensa que el responsable del conflicto no es Matanzo, "que lo es, sino el alcalde, que permite que dos de sus concejales planteen una guerra civil".

Ramón Gutiérrez, de la Asociación de Vecinos y Comerciantes de la Zona Centro de Madrid, comentó que tanto el teatro Alfil como el desaparecido, teatro Lara son de las mejores cosas que puede tener la zona: "La existencia de estos locales hace que en la calle haya cultura y, si desaparecen, ésta se sustituye por prostitución y droga". Gutiérrez señaló que esta última etapa del Alfil ha traído cosas muy positivas y buenas tanto para el vecindario como para los comerciantes: "Ello no quita que seamos los primeros interesados en querer que se cumplan las normas".

También la Asociación de Empresarios y Salas de Fiestas ha querido dar su opinión sobre el conflicto a través de su portavoz, José Antonio Fernández: "Estamos muy preocupados por la competencia desleal, nosotros nos esforzamos mucho y estos esfuerzos no son compensados con actividades como la que se llevó a cabo la pasada Nochevieja". Fernández hace referencia a la fiesta del 31 de diciembre organizada por la Concejalía de Cultura y a la que el concejal Matanzo se opuso y que, según esta asociación, provocó que sus locales se quedaran vacíos. "Ocurre lo mismo con otras salas como el Alfil, que quieren dar copas y música cuando se deben limitar a ser lo que son: teatros". Fernández piensa que ante todo se deben cumplir las ordenanzas, y cuando a un local como el Alfil no se le ha dado la licencia para que lleve a cabo otra actividad, "por algo será".

"El ascua y la sardina"

Matanzo declaró ayer que él tiene la obligación de hacer lo que le indiquen sus funcionarios: "Antes de precintar irá el secretario de la junta porque lo ha dicho el señor alcalde y yo le respeto".El edil piensa que en este conflicto todo el mundo "arrima el ascua a su sardina" y que hay gente que ha confundido el problema de fondo. "Me hubiera gustado ir a verles si no actuaran en un local ilegal". Matanzo afirmó que tiene previsto contratarles un día para que hagan la obra en su distrito: "¡Qué cosa más bonita puede haber que a uno le imiten!; eso lo hacen porque soy popular y no soy mediocre".

También Ramón Herrero, portavoz del grupo socialista del Ayuntamiento en asuntos culturales, dijo ayer que el cierre es un disparate político: "Se ha dado una sucesión de actos jurídicos que han supuesto la utilización de las normas en el sentido que más puedan perjudicar a los interesados".

Herrero piensa que además ha sido una tomadura de pelo al alcalde y al teniente de alcalde: "Mientras ellos estudiaban el expediente para buscar una solución, Matanzo dictaba el decreto por el que se precintaba el teatro y lo mandaba al Alfil".

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