Más de un millón de habitantes de Sevilla, afectados por cortes de agua durante 12 horas

La Mesa de la Sequía de Sevilla decidió ayer aumentar en cuatro horas las restricciones de agua, que ahora se prolongarán 12 horas: de las siete de la tarde a las siete de la mañana. Quienes incumplan esta norma podrán ser sancionados con multas de hasta 50 millones. Mientras, varios barrios de Toledo estrenan hoy suministros del Tajo, que acabará abasteciendo al conjunto de la ciudad. El ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, anunció ayer que el Gobierno estudia nuevas actuaciones a corto plazo para paliar la escasez de agua en varias ciudades. En el caso de Madrid, Borrell pidió un pacto entre todas las administraciones competentes para hacer las obras que eviten que puedan producirse en el futuro nuevas situaciones de desabastecimiento de agua.

En concreto, hablando de Madrid, Borrell dijo que el Estado está dispuesto a participar en "un gran convenio de financiación" con el fin de hacer obras que eviten en los próximos años situaciones como la que se padece ahora. La presencia del Gobierno en el acuerdo estaría aconsejada por la posible falta de capacidad financiera de la Comunidad y el Ayuntamiento para hacer frente a la situación.En Sevilla, los cortes de agua de siete de la tarde a siete de la mañana no comenzarán a aplicarse hasta que se celebre una reunión -prevista para hoy- del Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Agua (Emasesa). El incremento en cuatro horas en las restricciones a la capital y a 23 municipios de la zona del Aljarafe, supondrá un ahorro del 35% del agua que se consume habitualmente, según la concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de la capital andaluza y vicepresidenta de Emasesa, Carmen Diz.

Para el presidente de la Confederación del Guadalquivir, Antonio Álvarez, la situación no es tan alarmante como para el resto de los miembros de la Mesa de la Sequía, formada también por Emasesa, Aljarafesa, el Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía. "Si bajamos el consumo y aumentamos las tomas de agua del río Guadalquivir podemos tener agua indefinidarnente", dijo Álvarez.

Situaciones de emergencia como la que vive Sevilla no tendrán que esperar a la aprobación del Plan Hidrológico Nacional para ver parcialmente solucionado el problema de escasez de agua, según anunció ayer el ministro de Obras Públicas y Transportes José Borrell. "Yo quiero llevar al Consejo de Ministros de esta semana o al de la próxima semana la aprobación de actuaciones especiales a corto plazo", dijo el ministro ante un grupo de periodistas.

Las actuaciones a corto plazo costarían unos 10.000 millones de pesetas y consistirían, según Borrell, en obras urgentes de tendido de tuberías. "El problema de Sevilla es más fácil de resolver que el de Madrid. Sevilla no es una capital tan grande. Sólo necesitamos meter tuberías para llevar el agua de los embalses más cercanos". La aplicación de estas actuaciones a corto plazo se realizarían en Sevilla, Cádiz, Madrid, Toledo, Ciudad Real y Avila.

"Uno de los problemas de este país respecto al agua es que el 75% de los recursos se utilizan en regadíos", añadió el ministro. "Quizá la solución de Sevilla pasa también por modificar las costumbres, por un uso más controlado del agua en tantas hectáreas del valle del Guadalquivir".

En Toledo, varios barrios comenzaron ayer a recibir agua directa del río Tajo, cuyas calidades sanitarias están garantizadas.