Las medidas de ajuste se prolongarán hasta el año 1998

Una pintura sombría de la situación económico-financiera de Suecia para los próximos años fue realizada por la ministra de Finanzas, Annes Wibble, al presentar ayer ante el Parlamento el presupuesto anual. El Gobierno quiere ahorrar 14.000 millones de coronas (unos 225.000 millones de pesetas) durante el año en curso, y para ello propone medidas que afectarán directamente a los trabajadores, con recortes en los subsidios de paro y en las jubilaciones anticipadas.

De acuerdo con las cifras contenidas en el presupuesto, los suecos tendrán que ajustarse el cinturón por lo menos hasta 1998, año en que, según las previsiones del Gobierno, se verá una lucecita al final del túnel. El déficit fiscal durante el año 1992 fue de 183.000 millones de coronas (2,9 billones de pesetas), casi el doble de lo que anteriormente se había estimado. De ese déficit, más de la mitad se considera como déficit estructural, lo que significa que no desaparece por un cambio favorable de la coyuntura.El Gobierno se propone ahorrar 14.000 millones de coronas durante el año en curso y para ello propone una serie de medidas que afectarán directamente a los trabajadores. Las compensaciones por concepto de paro así como la que reciben los trabajadores por enfermedad serán disminuidas. Las jubilaciones anticipadas también serán objeto de recortes. Se establece además que no se pagarán los primeros cinco días de enfermedad (un paquete de crisis anterior había establecido un día de no pago por enfermedad), se reduce el apoyo económico a los estudiantes, así como también los subsidios a la vivienda.

Los impuestos sobre los ingresos se aumentan indirectamente a través de la baja de las deducciones que los contribuyentes puedan realizar en su declaración anual ante la oficina de impuestos.

De acuerdo con las previsiones del Gobierno, el Producto Nacional Bruto disminuirá este ano un 1,4% y crecerá el año próximo un 6%. El índice de paro alcanzará este año el 6% y el 7% el próximo, cifras que, según cálculos de la dirección del mercado del trabajo, ya están superadas en la actualidad. El consumo privado bajará este año un 3,2%, y un 3,7% el próximo.

El único aspecto positivo del panorama económico dibujado es el aumento de las exportaciones, que se prevé subirán un 6% este año y un 8% el año próximo. La rebaja de los gastos patronales y la devaluación de hecho de la corona, que se ha depreciado en más de un 20% con relación al dólar y al marco alemán y en un 17% respecto a la peseta desde noviembre pasado, han originado una mejora de la capacidad competitiva de la industria sueca.