Tranquilidad en los mercados europeos tras una semana de incertidumbre
Los mercados monetarios europeos recuperaron ayer una cierta tranquilidad, después de varios días de inestabilidad. Las principales monedas afectadas por la presión de los especuladores -franco francés, libra irlandesa y corona danesa- aguantaron bien el último día de la semana, gracias al apoyo directo del Bundesbank (banco central alemán) y a los efectos de la subida de los tipos de interés hasta el 100% en Irlanda.Al cierre, los operadores interpretaban la evolución de la sesión como una jornada de transición a la espera de nuevas tensiones la próxima semana, "ya que los problemas de fondo no se han solucionado". En España, la peseta se depreció en 72 céntimos frente al dólar, que cerró a 116,983 pesetas, y se mantuvo prácticamente igual frente al marco, que cotizó a 71,028.
Mientras tanto, el primer ministro francés, Pierre Beregovoy, apostó ayer por una reducción de los tipos de interés en Europa a lo largo del año e insistió en la importancia de mantener la paridad del franco en el SME.
Fuera del Sistema Monetario Europeo, la corona sueca sufrió ayer una fuerte caída frente al marco alemán, contra el que se depreció un 19,5%.
En Alemania, los sindicatos del sector público rechazaron ayer la primera oferta del Gobierno para el nuevo convenio salarial. La patronal ofreció una subida de un 2,25%, la mitad de lo que piden los sindicatos, que exigen, como mínimo, un aumento que cubra la elevación del coste de la vida, informa José María Martí Font.
Una de las condiciones del Bundesbank para poder bajar los tipos de interés es precisamente la moderación salarial, por lo que la negociación del sector público -la primera del año- es de vital importancia ya que establece los parámetros para todas las demás.
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