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Móstoles

El alcalde cierra el canal televisivo tras la emisión de un espacio crítico

Hace sólo 10 días, el alcalde socialista de Móstoles (190.000 habitantes, al sur de Madrid) utilizaba las cámaras de un canal privado local para enviar a la población su mensaje de Navidad. Ahora, José Baigorri ha ordenado su cierre por falta de licencia.Pero el Canal de Televisión de Móstoles (CTM) continúa su emisión, desde una unidad móvil, aunque el precinto les impide emitir en directo y la programación, ofrecida casi clandestinamente, es grabada. Consideran que la orden municipal es "un atropello a la libertad de expresión". Su director, José Blas Ramos, aventura que la decisión de Baigorri se debe a la emisión de una información en la que el Ayuntamiento no salía bien parado y al proyecto municipal de lanzar una emisora.

La clausura de esta emisora local, la única de la región que emite la señal por vía herciana, fue decretada por el regidor el lunes por carecer las instalaciones de licencia de apertura. Ese mismo día, la policía precintó las dependencias del canal y retiró el material. A la vez, los bomberos cortaron el cable coaxial que enlaza la torre de transmisión con el centro de emisiones. La decisión de clausurar la televisión ha sido denunciada por los responsables de Televisión Móstoles, quienes aseguran que sólo el Ministerio de Telecomunicaciones les puede clausurar la actividad.

El canal de televisión lleva emitiendo para este municipio desde enero de 1992 una programación de seis horas diarias, desde las seis de la tarde hasta la medianoche. Las emisiones se basan en películas, espacios informativos, divulgativos y debates.

Blas Ramos, periodista, creó la televisión local tras 13 años de trabajos en la prensa local y comarcal. Para fundar este proyecto obtuvo el beneplácito del alcalde y el apoyo económico de un grupo de empresarios y comerciantes de Móstoles. Con un capital de seis millones de pesetas y creando una sociedad limitada, la emisora de televisión salió al aire.

Aliento municipal

José Blas Ramos reconoce que, por el vacío legal existente, la emisión de su cadena es ilícita. Blas Ramos aseguró ayer que cuando pensó en fundar la emisora, el alcalde le dijo que era necesario promover en la localidad un vehículo de información que no existía. "Ahora no les interesa mantenerlo porque les molesta, y por eso nos cierran".Varios colectivos de Móstoles -sindicatos, partidos políticos y entidades vecinales- han creado una plataforma para apoyar el canal e intentar que siga emitiendo.

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