Sólo aplicaciones

La Bolsa española mantiene, aparentemente, sus constantes vitales, aunque para ello tenga que echar mano de una serie de recursos que no hacen si no confirmar la gravedad de la situación. De los 17.400 millones de pesetas negociados ayer, un tercio se logré a base de aplicaciones, cifra que puede subir bastante si se añaden algunas operaciones pactadas. El goteo que refleja el índice no pone en peligro, de momento, la supervivencia del movimiento lateral, aunque puede debilitarlo lo suficiente como para tantear de nuevo la ruptura del soporte del 210%.La negativa de muchos, inversores a participar en un mercado tan inestable, viene marcada por los pronósticos efectuados por la OCDE para la economía en el año próximo, que dejan a España en muy mal lugar. El problema real estriba en saber hasta donde ha descontado la Bolsa esa situación y qué movimientos se corresponden con la manoseada capacidad de anticipación del mercado, es decir, con el momento idóneo para comprar. De momento hay que pensar en una simple maniobra de entretenimiento. El índice se mantuvo durante todo el día en el mismo nivel, esto es, el recorte inicial se consideró suficiente y ni compradores ni vendedores hicieron nada. Al cierre perdió un 0,5 1 %, 1,10 puntos, mientras que el Ibex 35 cedía un 0,61%.