Aragón se opone a que se trasvase agua del Ebro a otras cuencas
El Gobierno aragonés, los partidos políticos -PAR, PP, PSOE e IU-, los sindicatos de riegos y organizaciones agrarias, entre otros colectivos, se han pronunciado públicamente en contra de las previsiones de incluir en el Plan Hidrológico Nacional el trasvase de agua del Ebro a Cataluña, Valencia y Murcia.El principal argumento es que, si se cumplen las previsiones del Pacto del Agua, suscrito en Aragón por todos los grupos de las Cortes y que el ministro de Obras Públicas, José Borrell, se comprometió a incluir en el Plan Hidrológico Nacional, no habrá excedentes de agua del Ebro para trasvasar a otras cuencas. No se descarta la convocatoria de movilizaciones.
El Ejecutivo autónomo acordó, en su último Consejo de Gobierno, elaboró una nota oficial en la que señala que antes de posibles transferencias de caudales del Ebro a otras cuencas, "considera prioritario y previo que se garanticen las demandas de presente y futuro que tiene Aragón, a través de las infraestructuras hidráulicas, recogidas en el Pacto del Agua, cuyo contenido espera quede reflejado en el Plan Hidrológico del Ebro y en el Plan Hidrológico Nacional"."Una vez realizadas estas inversiones, difícilmente quedarán reservas suficientes para pensar en posibles trasvases", añade el comunicado. El consejero del presidente y portavoz del Gobierno aragonés, José Ángel Biel, declaró: "Debemos hacernos fuertes en el Pacto del Agua, exigir su cumplimiento y no salimos ni un milímetro de dicho texto. Si se cumple, es muy dificil que quede agua sobrante para transferir". El PAR considera que los trasvases son innecesarios y agravan los desequilibrios entre regiones.
El PSOE opina que antes de pensar en trasvases deben realizarse las obras de regulación contenidas en el Pacto del Agua, cuyas inversiones se elevan casi a 200.000 millones de pesetas. El presidente del PP en Aragón, José Ignacio Senao, declaró ayer que "los recursos hidráulicos deben aprovecharse allí donde están". El PP, que ha anunciado su rechazo al Plan Hidrológico Nacional, considera que el Pacto del Agua fija unas reservas de 6.550 hectómetros cúbicos, que cubren las necesidades en el horizonte del plan hidrológico, "lo cual no obsta para posteriormente reivindicar mayores volúmenes con destino al desarrollo económico de Aragón".
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