La fuerte apuesta económica de Repsol, clave en el cambio de escudería de Carlos Sainz

La fuerte apuesta económica de la petrolera española Repsol ha sido la causa del cambio de escudería de Carlos Sainz apenas dos semanas después de ganar el Mundial de rallies de 1992. Repsol va a convertirse en el único patrocinador de la escudería privada Jolly Club-Lancia, sustituyendo a la marca Martini. Carlos Sainz ha optado por hacer más caso a su corazón que a su cabeza. Cuando todo el mundo considera que el Toyota Celica será el mejor coche en 1993, Sainz abandona la marca de sus éxitos para fichar por Lancia, cuyos coches parecen haber alcanzado su cenit.

Carlos Sainz no quería continuar en Toyota a pesar de tener un contrato firmado y de saber que, posiblemente, era la mejor opción para el futuro de su carrera deportiva. Demasiadas cosas han pasado en los últimos meses. Ni siquiera la consecución del título mundial y los dos triunfos consecutivos, en el Cataluña y el RAC, han servido de bálsamo.La relación entre Sainz y Ove Andersson, patrón del equipo Toyota, ya estaba rota. Sus diferencias no han hecho más que crecer desde que en junio firmaron el contrato para 1993. Después, Andersson negoció con la petrolera Castrol para sustituir el patrocinio de la española Repsol. En septiembre, se produjo el fichaje del francés Didier Auriol -Andersson se aseguró al que parecía virtual campeón del mundo- y más tarde el cambio de Michelin por Pirelli como marca de neumáticos. Todo ello sin el conocimiento de Sainz. El diálogo y la buena comunicación entre la dos partes desaparecieron.

La oportunidad de resolver esta situación le ha llegado a Sainz de la mano de Repsol, con quien tenía firmado un contrato para 1993. La petrolera española ha apostado fuerte -casi toda su política comunicativa se basa en la imagen del bicampeón del mundo- y le ha apoyado en todo momento. Sainz no quería abandonar a su patrocinador. Por otra parte, las relaciones entre Sainz y Lancia -a través ahora de la escudería Jolly Club, bajo cuyos colores compiten los coches italianos- siempre han sido excelentes. Era su sueño correr con Lancia.

Desaparece Martini

El acuerdo entre Repsol y Lancia, firma controlada por el grupo Fiat, se cerró en la tarde del martes. El comité ejecutivo de Repsol, reunido en Madrid, respondió en cinco minutos a la propuesta hecha por Lancia, en la que pedía elevar la cifra pagada por el anterior patrocinador, Martini. Según fuentes del grupo español, el comité ejecutivo no tuvo ninguna duda en responder afirmativamente.El plazo inicial del contrato queda fijado hasta el final de la próxima temporada, aunque es prorrogable por otro año. Las fuentes consultadas no han querido dar la cifra que pagará Repsol, aunque han reconocido que será superior a los 400 millones que pagaron a Toyota en el pasado campeonato mundial. El presupuesto total para patrocinio de Repsol ronda los 2.000 millones de pesetas, según esas fuentes.

Inicialmente, Lancia propuso a Repsol ir como segundo anunciante con menor espacio que Martini, tradicional sponsor de Lancia. Los representantes de Repsol, con Carlos Sainz presente en las negociaciones, se negaron en redondo: "O solos o no vamos", dijeron. Ante eso, Lancia puso como condición que superaran la cifra comprometida por la empresa de bebidas Martín¡.

El grupo petrolero español completa este contrato con el que le ha concedido la Federación Internacional de Automovilismo (FISA) para suministrar la gasolina de todos los equipos participantes en el próximo mundial de rallies. El suministro lo hará a través de su filial británica Carless Petroleum. Las fuentes consultadas aseguran que este contrato va a suponer importantes ingresos, ya que valoran en unas 300 pesetas el litro de gasolina vendido en los rallies.

La duda está ahora en saber hasta qué punto el piloto español ha acertado. Es un interrogante que no se desvelará hasta dentro de unos meses. Lo que está claro es que Sainz ha tomado la opción de más riesgo, por fidelidad y por despecho. Aunque en la temporada los Lancia han sido superiores a los Toyota, en las dos últimas pruebas la relación de fuerzas cambió. El coche japonés ha sido mejor en el asfalto de Cataluña y en los bosques británicos.

Escudería privada

Por otra parte, el Toyota parece tener mayores posibilidades de evolución que el Lancia. El anuncio de la marca italiana de abandonar los rallies, en el mes de septiembre, convierte el nuevo equipo de Sainz en una escudería privada, en teoría sin el apoyo directo de la fábrica de Turín. Sin embargo, es probable que el piloto español haya regresado de Italia con el compromiso de que Lancia estará, de alguna manera, detrás de este proyecto y que continuará el desarrollo de los coches.El fichaje de Sainz por Lancia, con Repsol como patrocinador único, revoluciona el panorama en el Mundial. Hay nuevas parejas: Sainz-Delecour en Lancia y Auriol-Kankkunen, que pasan a Toyota. Kankkunen ya fue piloto de Toyota en 1989. También la firma Martini pierde su tradicional papel como patrocinador de Lancia y queda excluida de una competición que ha apoyado durante más de 10 años. El piloto italiano Andrea Aghini continuará en el Jolly Club, con un programa reducido, apoyado a medias por Repsol y la lotería italiana, Totip.