La huelga del fútbol uruguayo impide al Nacional jugar la Supercopa
La asamblea de la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales negó el lunes a los jugadores del club Nacional de Montevideo la posibilidad de disputar la Supercopa suramericana contra al Racing Argentino y ratificó la huelga que mantiene paralizado el campeonato uruguayo desde hace dos semanas. La situación se ha agravado en las últimas horas por lo que se teme que se produzca una finalización abrupta de la temporada 1992-93.El presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Hugo Batalla y el presidente de la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales (MUFP), Fernando Silva, estuvieron analizando la posibilidad de una solución al conflicto, pero no se llegó a un acuerdo.
Por 245 votos a favor y 15 en contra, la asamblea negó el levantamiento de la huelga a los jugadores del Nacional, a pesar de que éstos argumentaron que la ausencia del equipo en la Supercopa (la ida está prevista para el día 27 en Buenos Aires y la vuelta para el 3 de noviembre en Montevideo) puede representar una serie de sanciones internacionales para el fútbol uruguayo. El Nacional es el único conjunto de aquel país con obligaciones internacionales.
Los promotores de la huelga aseguraron que su actitud es general y por tiempo indefinido, por lo que no ha lugar a excepciones. La postura, que cuenta con el apoyo de la principal central sindical del país, de tendencia izquierdista, ha sido severamente criticada por la prensa de Montevideo.
Inhabilitación
El paro de los profesionales estuvo motivado por la inhabilitación de un mes que sufrieron dos clubes -el Basáñez, líder de la división de ascenso, y el Villa Teresa, colista- por los incidentes violentos protagonizados por sus respectivas hinchadas, sucesos que concluyeron con la muerte de un aficionado de 51 años.
La huelga se encuentra en un callejón sin salida ya que el Tribunal de Apelaciones de la Asociación Uruguaya de Fútbol ratificó por unanimidad el fallo contra los dos clubes citados.
