Gil pide a los hinchas del Atlético que no viajen a Turquía por temor a la violencia del público
Jesús Gil, presidente del Atlético de Madrid, recomendó ayer a los seguidores del club rojiblanco que no acompañen al equipo hasta Trabzon (Turquía), donde mañana debe enfrentarse al Trabzonspor en partido de ida de los octavos del final de la Recopa. La petición de Gil está motivada por los incidentes registrados el fin de semana en dicha ciudad después del partido que disputaron el rival del Atlético y el Fenerbahce, encuentro que concluyó con victoria visitante (3-4). Cuarenta y seis heridos, 11 de ellos policías, y decenas de vehículos quemados fue el balance de lo sucedido.
La actuación del colegiado Hassan Ceylan encrespó los ánimos de los exaltados hinchas del Trabzonspor, que comenzaron a lanzar piedras al campo. Los peores incidentes se registraron una vez concluido el encuentro en los alrededores del estadio Huseyin Avin Aker. Los exaltados intentaron agredir al árbitro, que se había refugiado en un furgón policial, a la expedición del Fenerbahce y a un grupo de informadores. Los enfrentamientos concluyeron con 46 heridos, once de ellos policías, decenas de vehículos dañados y daños materiales de diversa consideración.El Atlético descartó cualquier petición de aplazamiento o cambio de sede del partido, posibilidad apuntada por los medios de Turquía en su relato de los hechos. "El clima es de total tranquilidad", aseguró ayer el jefe de prensa de la entidad madrileña.
Sin embargo, otros portavoces sí mostraron inquietud, según informa José Miguélez. Los incidentes del pasado domingo, sumados a las experiencias de algunos empleados del club en Turquía, incluido Luis Aragonés, han contribuido a aumentar la preocupación.
Presión del público
El Atlético, con todo, teme más el perjuicio deportivo que pueda causar la presión ambiental. Los aficionados no se limitan a gritar dentro del estadio, sino que tienen la costumbre de pasar la noche en las inmediaciones del hotel donde se aloja el rival para no dejar dormir a los jugadores.
La expedición del Atlético, que parte hoy hacia Turquía, la componen unas 115 personas.
En el grupo figuran 20 miembros del Frente Atlético, a los que Gil ha advertido que "Turquía no es Brujas" y recomendado que se abstengan de hacer alardes provocativos que pudieran acarrear problemas con las fuerzas de seguridad de aquel país, famosas por su severidad. "Desde luego, no pensamos llevar símbolos nazis ni judíos, porque nos la jugamos", comentó un miembro del grupo.
La empresa de viajes que gestiona los desplazamientos del Atlético de Madrid contactó ayer con la entidad rojiblanca para conocer si los incidentes podrían provocar algún cambio en el plan de viaje.
La respuesta del representante del club fue negativa y tranquilizadora, pues se apuntó la posibilidad de que algún responsable de seguridad viaje con el equipo. Podría tratarse de Julio Moreta, delegado gubernativo en el estadio Vicente Calderón.
El Atlético recibirá la protección policial habitual en este tipo de enfrentamientos. Entre las recomendaciones recibidas figura la de acudir al estadio con un par de horas de antelación, para evitar incidentes.
Asimismo, el Atlético ha invitado al viaje a Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol y vicepresidente de la Unión Europea de Asociaciones de Fútbol (UEFA). De esta manera, el club está convencido de que la federación turca extremará las medidas de seguridad.
Por otro lado, el lateral Toni, con un pinchazo en el cuádriceps de la pierna izquierda, no podrá jugar en Turquía.
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