Legionarios en son de paz Soldados de los cuatro tercios preparan en Almería su salida hacia Bosnia

"Para nosotros son unas maniobras como otras. No sabemos nada más". Así de explícito se mostraba ayer uno de los sargentos del I Tercio de la Legión, el Gran Capitán de Melilla, mientras inspeccionaba los blindados que abandonaban la proa del buque Martín Posadillo para apostarse en el muelle de Almería.

Poco antes del mediodía, legionarios de Ceuta y Melilla acudían hasta el puerto almeriense para recibir los vehículos acorazados procedentes de sus campamentos. Distendidos y relajados, los soldados daban por inauguradas unas maniobras militares en la Península semejantes a otros ejercicios pero que poseerán, sin embargo, un fin novedoso: su partida hacia Bosnia-Herzegovina para proteger a los convoyes humanitarios hacia Sarajevo. "Creo que será una de las misiones más interesantes para la Legión, desde el punto de vista humano y técnico", comentaba ayer el capitán del I Tercio, José Luis Cabello, mientras se procedía a desembarcar los 43 vehículos blinda dos. Cabello calificaba la mi sión de "reto", al tiempo que elogiaba las virtudes castrenses del cuerpo: "Somos una fuerza versátil y capaz de asumir cual quier tipo de acciones".

Los soldados, más parcos en palabras que sus mandos, reducían sus comentarios a destacar la incomodidad de la travesía marítima o su sentido de la disciplina. "Si tengo que ir, claro que voy. Es mi deber, ¿no? Pero sólo puedo decir que hemos venido a realizar unas maniobras conjuntas , apuntaba algún suboficial.

Tampoco el capitán José Luis Cabello tildaba la misión de bélica: "No vamos a involucramos en ningún conflicto, no se trata de una misión de guerra. Pretendemos contribuir a remediar una tragedia".

Un portavoz del Ministerio de Defensa informaba de que la aportación española al contingente que se dedicará a la protección de la ayuda humanitaria se pondrá en marcha cuando la ONU apruebe la resolución que les permita repeler agresiones para su defensa.

Durante una quincena, los 400 soldados que se concentrarán en la base militar Álvarez de Sotomayor, en Almería, reproducirán situaciones similares a las que pueden encontrarse en la antigua Yugoslavia. A la espera de la llegada de personal de apoyo logístico, transmisiones y paracaidistas, las peregrinaciones de legionarios desde Ceuta, Melilla, Fuerteventura y Ronda hasta Almería terminaban ayer.