Las ciudades candidatas a los JJ OO del 2000 impresionadas por los voluntarios de Barcelona
Las ocho ciudades candidatas a albergar los Juegos Olímpicos de verano de¡ año 2000 asistieron a los de Barcelona y tomaron buena nota de lo visto. En general, su impresión fue muy positiva. Creen que el listón está muy alto. El masivo despliegue de voluntarios fue uno de los aspectos que más impresionó a los representantes de Pekín, Berlín, Brasilia, Estambul, Manchester, Milán, Sidney y Tashkent. En otros asuntos, las divergencias fueron sustanciales: unos dijeron que las instalaciones estaban "demasiado lejos" entre sí y otros que "su proximidad es, algo a imitar".
De las ocho candidatas, Sidney, Berlín, Manchester y Pekín parecen, hoy por hoy, las mejor situadas para introducirse en el sobre que Juan Antonio Samaranch, cuya reelección como presidente es previsible, ha de abrir el próximo año, en Montecarlo, al término de la asamblea anual del Comité Olímpico Internacional (COI).Los representantes de Sidney consideraron que lo más destacable de Barcelona fue "la presencia de los voluntarios y su gran número". "Su espíritu y su amabilidad han proporcionado una sonrisa general, a los Juegos. Nos gustaria copiar este aspecto", comentaron.
John Murrey, diputado del Parlamento regional y uno de los impulsores de Sidney 2000, opinó que los Juegos de Barcelona serán recordados "por la felicidad y la relajación general". "Si aparecía un problema, se sonreía y desaparecía. Ése es el secreto", dijo. También hay cosas que, en su opinión, podrían mejorarse, como la ubicación de las distintas instalaciones, que "en Barcelona estaban demasiado lejos". "Es normal", expuso, "que se aprovechen las ya existentes, pero en nuestro caso lo haríamos casi todo nuevo y muy próximo para una mayor comodidad de los deportistas y del público que quisiera presenciar varias competiciones a lo largo de un solo día".
En esto difiere Manchester. Francis Tomf, de su candidatura, alegó que uno de los elementos más positivos de Barcelona fue precisamente "la proximidad de todas las instalaciones" y, en general, "la organización del transporte y el movimiento de grandes cantidades de gente", además de la ayuda de los voluntarios y la participación de la ciudadanía". Manchester, al norte de Inglaterra, es una ciudad de pasado industrial y presente deprimido que aprovecharía los Juegos para rehabilitar su tejido urbanístico y su imagen externa. Los de Manchester, muy diplomático, aseguraron no haber detectado "ningún fallo de importancia ni nada sustancialmente mejorable" en Barcelona.
Aunque para diplomacia la de Berlín. "Las únicas flaquezas que hemos constatado en Barcelona han sido las nuestras", confesó un portavoz.
"Tenemos mucho que copiar de Barcelona: el espíritu de amistad y de hospitalidad y la participación cívica, fundamentalmente", añadió. La candidatura de Berlín parecía aventajar a las demás hasta que se descubrió que había encargado a una agencia de detectives la elaboración de infonnes sobre qué miembros del COI eran susceptibles de ser sobornados. Para más escándalo, los informadores reportaron que sólo siete, de los 92, son incorruptibles. A Berlín los Juegos le servirían para remozar el sector oriental y homogeneizar la ciudad que se dividió al término de la II Guerra Mundial.
Yen Jien Zheng habló de que la delegación de Pekín "ha aprendido mucho" en Barcelona. "La organización ha sido muy buena; la ceremonia inaugural, espléndida; los catalanes, amabilísimos", recitó. La cortesía china no conoce límites. A Pekín podría interesarle copiar el uso masivo de voluntarios, si bien, en último término, "eso dependerá de la situación", concluyó Zheng de forma un tanto enigmática.
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