México condiciona la firma del tratado comercial con Canadá y EE UU a mantener su sector petrolero público

México reiteró ayer en Washington, durante la séptima reunión ministerial para la redacción del Tratado de Libre Comercio (TLC), que no tiene previsto negociar la soberanía petrolera consagrada en su Constitución. Este es uno de los principales escollos que se presentan en las negociaciones del tratado que, en principio, podrían haberse cerrado el pasado fin de semana, y que muy posiblemente lo hagan en las próximas horas.Estados Unidos, con el apoyo de Canadá, insiste en lograr una participación privada en la explotación e industrialización del sector energético mexicano, que controla totalmente el Estado.

En un comunicado oficial, la delegación mexicana señala que las "restricciones constitucionales no están en la mesa de negociación". Esta nota oficial salió al paso de las versiones sobre la insistencia de Estados Unidos en participar en el sector petrolero de México.

En la nota de la delegación mexicana se añade que "lo importante es el tratado en sí mismo, y no las fechas de su negociaciíón ni el plazo en el que se firme". Para el Gobierno mexicano, "lo imprescindible es llegar a un acuerdo y dejar todos los puntos muy bien clarificados para que pueda ser eficaz en el futuro".

Las negociaciones trilaterales entre los ministros de Comercio de Canadá, Estados Unidos y México entraron ayer en su undécimo día ininterrumpido de trabajo. Sobre la demora en la firma de este tratado, la delegación mexicana, encabezada por el secretario de Comercio, Jaime Serra Puche, destacó que "el último minuto de la negociación es tan importante o más que los meses empleados por los sectores social, obrero, campesino, privado y público" que participan en el proceso de las conversaciones trilaterales.

La declaración añade que Ios acuerdos que se tomen influirán por muchos años en el desenvolvimiento económico del país". El tratado de libre comercio, cuyas negociaciones comenzaron hace 14 meses, proyecta crear la zona de libre comercio más grande del mundo, con 370 millones de consumidores.