La cumbre indígena
Mientras los jefes de Estado iberoamericanos estén reunidos en Madrid, habrá otra cumbre, de representantes de comunidades indígenas americanas, para mantener un debate paralelo en el que denunciarán "el carnaval del 92".
Los actos comenzaron ayer en Madrid con una comida ofrecida en una vivienda ocupada ilegalmente.
El indio aymara boliviano Constantino Lima Chaves, representante del movimiento Tupacatari 1, consideró que la cumbre oficial "es negativa y humillante para los indios".
Mario Agredo, delegado en España del Consejo Indio Exterior, acusa a los jefes de Estado de "venir a firmar un fondo de ayuda para los indios, pero sin contar con ellos".
El representante de los indios juna panameños dice: "El 92 visto desde los blancos es pasado, para nosotros es presente, porque seguimos reprimidos".
La representante de los indios mayas de Guatemala definió así el descubrimiento de América: "No fue un encuentro, sino un encontronazo, más aún, un choque que todavía sigue".
Para cerrar esta cumbre paralela, habrá una concentración pacífica el viernes en la Puerta del Sol. Por último, el poeta y profesor de latín Agustín García Calvo asistirá a los debates y a la lectura del manifiesto indio.
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