La CE, después del veto

El rechazo danés al Tratado de Maastricht es un importante revés para los políticos y funcionarios de Bruselas y Copenhague, que fueron los que lucharon para conseguir el sí de este pequeño y escéptico electorado. Pero no todo está perdido, desde luego no para la CE, ni incluso respecto a las esperanzas de una unión económica y monetaria. ( ... ) Desde el mismo momento de la firma en Maastricht ha sido evidente que el tratado contiene importantes contradicciones. ( ... )Los 11 pueden llevar adelante el proceso de ratificación actual y confiar en que los daneses se inporporen al mismo, quizá a través de otro referéndum. ( ... ) La mayor dificultad es que los daneses pueden haber enunciado dudas ampliamente compartidas. De hecho, si los líderes europeos se han alejado demasiado de sus pueblos, los logros de la CE y ellos mismos se hacen vulnerables a los contraataques populistas y xenófobos. Mejor que intentar seguir como si nada hubiera sucedido es tomar buena nota y afrontar el nuevo, reto. ( ... )

La CE, tal como es ahora, representa la base de la prosperidad y estabilidad de Europa occidental y ( ... ) es una organización de países democráticos que sólo sobrevivirá con el consentimiento de sus ciudadanos. El fracaso en conseguir el mismo debe hacer reflexionar. ( ... ) Si los políticos deben reconsiderar lo ya pactado, hágase. A la larga, sólo así se logrará construir una Comunidad duradera, satisfecha e integrada.

4 de junio