Los comerciantes piden el traslado de una máquina de jeringuillas

Cerca de 300 vecinos y comerciantes de Parla (69.000 habitantes) han solicitado el cambio de ubicación de la máquina expendedora de jeringuillas para drogadictos, situada a la puerta del centro de salud. Los comerciantes dicen que la máquina les ahuyentará a los clientes.

Los comerciantes instan al alcalde, el socialista José Manuel Ibáñez, a través de un comunicado, a que traslade la máquina ques ólo lleva un mes en funcionamiento- desde la calle de la Purísima Concepción a una zona alejada de los centros comerciales y de paseo del municipio. Alegan que la expendedora puede atraer a pequeños traficantes y ahuyentar a los clientes. Los comerciantes y vecinos reconocen en la nota los derechos de la población drogadicta, aunque, dicen, "no se puede menoscabar el nivel de servicios de una mayoría con tal de salvaguardar los derechos de una minoría".

El concejal de Sanidad, Santiago Martín, ha confirmado que la máquina no cambiará su actual emplazamiento por ser el más idóneo y estar consensuado, tras largos debates, con el resto de las fuerzas políticas de la localidad. La máquina está en la puerta del centro de salud municipal.

Martín ha querido tranquilizar a los comerciantes: "El único cometido de la máquina es suministrar jeringuillas a los drogodependientes y éstos, una vez obtenido lo que quieren, no tienen nada que hacer en ese lugar".

Del mismo modo ha señalado el edil que en este caso las ventajas son mucho mayores que los inconvenientes, puesto que se evita el problema de las jeringuillas usadas y abandonadas en los parques y también el contagio de los toxicómanos entre sí por medio del uso compartido de las mismas.

La de Parla es la tercera máquina expendedora de jeringuillas de la Comunidad de Madrid, después de las de Getafe y Alcalá de Henares. En Getafe, unos desconocidos destrozaron recientemente la máquina a golpes de pico.