Van Poppel empata con Abdujapárov
Jean Paul van Poppel (PDM) se impuso ayer en el sprint más espectacular de la presente Vuelta Ciclista a España, el de la quinta etapa: Albacete-Gandía (213,5 kilómetros). De esta forma igualó a dos victorias con Yamolidín Abdujapárov, que, eso sí, se quejó de una maniobra irregular de su rival. El uzbeco, aún no ha conseguido derrotar al holandés en una Regada. Sus dos triunfos los ha conseguido en aquellas en las que no participó éste. Uno di los favoritos, el suizo Tony Rominger (Clas) se cayó, sufrió una ligera conmoción cerebral y se dolió M hombro derecho. Sin embargo, continuará en la prueba.
Fue un sprint digno del Giro, que tiene el monopolio de la belleza. La etapa había sido tranquila -no hubo ni una escapada importante- y todos los velocistas llegaron descansados a Gandía. La recta final era perfecta: un kilómetro ligeramente ambientado por la brisa playera. El lanzamiento comenzó muy pronto, a la salida de la última curva. Los codos funcionaron a fondo y se produjo una caída multitudinaria a falta de 500 metros. Pero los velocistas estaban delante. Vanderaerden atacó demasiado pronto. La recta se le hizo interminable. A falta de 200, saltó imparable, por el centro, con el camino libre, Van Poppel. A su rueda, confiado en sus fuerzas, Abdujapárov, pero no logró remontarle.Esos momentos valieron por todo. Por primera vez en muchas ediciones de la Vuelta, ningún modesto intentó la escapada. Ni siquiera las bonificaciones animaron al grupo. Uno de los pocos que las aprovechó fue el líder, Peio Ruiz Cabestany, que incrementó su ventaja en cuatro segundos gracias a un segundo puesto en un sprint especial. Tampoco hubo viento para crear nerviosismo. Los 212 primeros kilómetros parecieron simplemente el aperitivo, la fase preparatoria de la llegada.
Exageración
Los directores aprovecharon la tranquilidad de la jornada para analizar en frío las consecuencias del golpe de mano del ONCE en la etapa de Albacete. "Todo el mundo lo ha exagerado: 29 segundos no son nada. La Vuelta se decidirá por minutos", declaró José Miguel Echávarri, el del Banesto. "Todos quieren sacar conclusiones. Como si la Vuelta estuviera ya decidida y... aún no ha comenzado", explicó el hombre que pretende llevar a Pedro Delgado a su tercera victoria en la Vuelta.
El protagonista del jueves, Manuel Saiz, el del ONCE, también quitó trascendencia a la maniobra de su equipo: "Todo estaba preparado desde hacía tiempo. Lo importante ha sido que hemos colocado bien a varios corredores con opciones".
El líder, Ruiz Cabestany, tiene una explicación lógica para el comportamiento de los hombres que no entraron en el primer abanico camino de Albacete: "Vieron que era peligroso meterse en él y debieron de pensar que, como eran corredores buenos, podían montar otro y mantener la situación perfectamente controlada. Lo que no podían suponer es que los del ONCE y los que íbamos con ellos pudiéramos "tirar tan fuerte". Federico Etxabe (Clas), uno de los favoritos, que perdió 29 segundos, casi coincide con el donostiarra: "Para Rominger y para mí, el importante es Delgado. Nosotros, simplemente, nos cuidamos de no perder tiempo en relación con él".
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