La bandera de Cataluña desfilará en la inauguración de los Juegos Olímpicos
La bandera de Cataluña desfilará en el estadio Olímpico de Montjuïc en la ceremonia inaugural de los Juegos de Barcelona. Esta medida cerrará la brecha abierta la semana pasada entre los socios de¡ comité organizador (Gobierno, Generalitat, Ayuntamiento y Comité Olímpico Español) a raíz de las demandas del presidente catalán, Jordi Pujol, secundadas por Juan Antonio Samaranch, de una mayor presencia de los símbolos de Cataluña en los JJ OO. Representantes de las cuatro instituciones negocian también la posibilidad de que el himno catalán, Els segadors, suene en algún momento de la inauguración de Barcelona 92, ante una audiencia televisiva de casi 3.500 millones de personas.
Fuentes de la comisión permanente del comité organizador (COOB) confirmaron ayer a EL PAÍS la existencia de un acuerdo de base para incorporar la senyera como elemento móvil en la ceremonia inaugural, dado que hasta ahora sólo estaba prevista su presencia estática en los mástiles del estadio Olímpico.La forma en que se materializará esta medida no cuenta con un acuerdo definitivo. La fórmula con más posibilidades, que coincide con la propuesta del Comité Olímpico Catalán (COC), es que la senyera sea portada por los presidentes de las federaciones catalanas abriendo o cerrando el desfile de atletas. El equipo español, incluidos los deportistas catalanes, desfilará en un solo grupo encabezado por la bandera española, que será portada por el príncipe Felipe.
Las partes implicadas en la negociación esperan tener listo el viernes próximo un acuerdo definitivo sobre el cuándo y el cómo del desfile de la senyera. De ser así, el pacto sería presentado en la conferencia de prensa que ese mismo día ofrecerá el presidente de la comisión del Comité Olímpico Internacional (COI) que supervisa la organización de Barcelona 92, Gunnar Ericsson, que mañana iniciará su 11ª y última visita de control a la capital catalana.
Representantes de las cuatro instituciones están negociando también la posibilidad de que Els segadors suene por los altavoces del estadio en algún momento de la inauguración. En este asunto, sin embargo, aún no se ha alcanzado un acuerdo de base. Fuentes conocedoras de las conversaciones destacaron la complejidad que supone programar la interpretación del himno catalán en un momento de la ceremonia que no sea ni demasiado solemnne ni demasiado secundario.
En el primer caso, Els segadors podría llegar a equipararse protocolariamente con el himno español, circunstancia que no sería aceptada por el Gobierno; en el segundo caso, el himno catalán podría quedar impregnado de tintes folclóricos, lo que toparía con la Generalitat.
Iniciativa anterior
Miembros de la comisión permanente del COOB mantienen conversaciones al respecto desde el pasado lunes, aunque éstas se desarrollan al margen de las reuniones oficiales de dicho organismo y nunca reúnen a un mismo tiempo a representantes de las cuatro partes.
Fuentes socialistas lamentaron ayer en declaraciones a este periódico que la inclusión de la senyera y Els segadors en la inauguración de Barcelona 92 pueda ser interpretada ahora como una concesión a desgana motivada por las expectativas generadas por la controversia. De acuerdo con esta versión, estas medidas responden a una iniciativa de Maragall que habría sido planteada al menos hace un mes -es decir, antes del nacimiento de la polémica- a Abad y a los representantes del Ayuntamiento en la cúpula del COOB.
Pujol, por su parte, sugirió el viernes pasado que su demanda de una mayor catalanización de los Juegos podría concretarse en la presencia de la senyera en el desfile.
En la reunión de la permanente del COOB celebrada ayer, sólo Maragall tomó la palabra para referirse a este conflicto, según la declaración oficial ofrecida al término de la sesión por Abad. El alcalde manifestó que el COOB está abierto a cualquier iniciativa que mejore las ceremonias, siempre y cuando sea planteada en el seno del comité. Maragall apuntaba así el malestar del Ayuntamiento por las reclamaciones públicas de Pujol y de Samaranch, que se producían después de que la Generalitat hubiese pactado las ceremonias con los demás socios del COOB y de que Samaranch las hubiese aprobado.
La presencia de la senyera y de Els segadors en la inauguración no satisfará, no obstante, los deseos de Esquerra Republicana (ERC), cuyos líderes han amenazado con actos de protesta si Cataluña no recibe en los JJ OO el mismo trato que las repúblicas de la ex URSS.
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