_
_
_
_
_

Cruzar el 'charco' por aire y a pedal

Dos franceses atravesarán el Atlántico a bordo del dirigible más pequeño del mundo

Parece cosa de locos. Pero el piloto francés Gérard Feldzer, de 48 años, un tipo musculoso y enjuto, con aspecto de corredor del Tour de Francia que ha leído mucho a Balzac, está muy cuerdo. De hecho, en 1986 fue seleccionado como astronauta, entre otras cosas, por su sólido equilibrio anímico. Nunca llegó a las estrellas, aunque ahora se dispone a ver cumplido otro de sus grandes sueños: reproducir por el aire el viaje de Cristóbal Colón a América.Feldzer pilotará, junto a Nicolás Hulot, el dirigible llamado Continente, que ayer se presentó en Huelva. Con él intentarán la insólita aventura de cruzar el Atlántico -como Colón en 1492-, pero volando con propulsión muscular: a pedales. El dirigible, con una velocidad de 36 kilómetros por hora, a 500 metros sobre el mar, tiene previsto atravesar en 10 días los 6.800 kilómetros que separan Huelva de las Antillas, sin escalas. Sólo un barco les seguirá hasta las Canarias, la parte más difícil del trayecto por los cambios climáticos. Los pilotos pedalearán unas seis horas diarias en el dirigible más pequeño del mundo: pesa unos 250 kilos, como una motocicleta. Durante la noche lanzarán un ancla, que detendrá el vuelo y les permitirá descansar a unos 50 metros de altura.

"Naturalmente que tengo miedo, de lo contrario sería un temerario. En este viaje nos puede ocurrir de todo, pero no pensamos en el peligro, sino en el triunfo", manifestó ayer Feldzer, que ha estado entrenando intensamente junto al equipo francés de ciclismo para poner las piernas a punto para el interminable pedaleo.

La aventura, en definitiva. Pero puestos a cosas menores, Feldzer explicó: "Uno de nuestros problemas residirá en deshacernos de los residuos sólidos. Primero serán solidificados en la cabina y, cuando podamos, los lanzaremos al mar". La dieta de los pilotos se basará en carne, pescado, legumbres, arroz y patatas. El viaje está subvencionado por el Patronato Quinto Centenario de Huelva y por una cadena de hipermercados.

La travesía comenzará a finales de marzo, cuando los vientos sean más favorables. La navegación dependerá de los alisios. "Es una experiencia absolutamente ecológica, pues no utilizaremos combustible ni motor alguno; sólo los pedales", resalta Feldzer, un comandante de Air France con más de 12.000 horas de vuelo a sus espaldas, casado y con dos hijos. Su compañero, Nicolás Hulot, periodista francés de 37 años, soltero, fue el primero en alcanzar el Polo Norte en ultraligero. Ayer estaba en Asia. La conducción del dirigible es más sencilla de lo que parece, según Feldzer. La dirección de la nave será controlada a través de un mando situado entre ambos pilotos. La estabilidad vertical la proporcionan dos alerones situados en los laterales. Para que suba o baje se utilizarán dos sistemas: el primero desplaza la cabina hacia adelante o hacia atrás, y el segundo infla y desinfla de helio el balón de la nave.

Ahora esperan tener buenos vientos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_