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Moroso a la vista

Una empresa de cobro de deudas facilita a sus abonados 70.000 datos de morosos

"Los pequeños y medianos empresarios llegan a nosotros como a la UVI de un hospital, así que hemos decidido empezar a aplicar médicina preventiva". Así explica Manuel Naharro, director general adjunto del Grupo El Cobrador del Frac, la razón de la constitución de un banco de datos de "morosos peligrosos". La iniciativa de poner en el mercado más de 70.000 datos surge en un momento especialmente delicado por el vacío legal que existe sobre este tema y el mal momento de la economía.

La creación de un banco de datos llega en un momento crucial ya que se haya en plena discusión en el Parlamento la futura ley de protección de datos informáticos, de forma que sobre su utilización aún existe un profundo vacío legal. Además, el enfriamiento económico hace más necesario saber quién es buen pagador a tenor de los últimos datos oficiales de suspensiones de pagos, quiebras y morosidad.El año pasado suspendieron pagos cerca de 500 empresas, el doble que en 1990 con una deuda media tres veces mayor y quebraron el triple de compañías que el año anterior. Con este panorama los responsables de El Cobrador del Frac han decid ido sacar a la luz el pasado primero de marzo su base de datos "para darle una herramienta a las pyrnes para que. puedan defenderse". La empresa, dedicada en principio a cobrar deudas, ofrece ahora datos sobre morosos. Para ello hay que desembolsar una cuota de entrada de 35.000 pesetas y 5.000 pesetas al mes. Es el precio por cuatro consultas mensuales.

Según la empresa, no se informa sobre retrasos en pagos como una letra del coche, sino sobre "morosos peligrosos que provocan averías en las empresas y que las hunden". Los profesionales de la morosidad tienen su denominador común, explica Naharro. Cambian mucho de compañía y no poseen bienes a su nombre.

Como resultado del mal vicio de no pagar lo que se debe, El Cobrador del Frac tiene más de 14.000 clientes por toda España y todos ellos con el mismo retrato robot: "pequeño o mediano empresario muy agobiado y harto de que le tomen el pelo". De ellos han ido obteniendo todo tipo de documentación mercantil y consiguiendo una información con la que conformar el banco de datos que ahora ofrecen. Y creen que sin problemas, porque para elaborarla "no hemos accedido a ninguna base de datos privada o pública".

No para cotillas

Antes de poner en marcha este servicio la compañía encargó dos dictámenes jurídicos a dos cate dráticos de los que no desvela su nombre -uno de derecho constitucional y otro de perial-. Según Naharro, los dos han sido positivos con una serie de salve dades. Los dos catedráticos señalan que la única información que puede facilitar El Cobrador del Frac es la estrictamente económica y que ésta tiene que ser veraz. Además, su objetivo nunca debe ser el de satisfacer la cu risosidad sino que debe solicitar se con el fin de proteger el tráfico jurídico mercantil. El último de los matices se refiere a que los datos deben tener un límite de antigüedad -los cinco años anteriores- Por otro lado, la compañía cobradora de morosos obliga a que "el cliente se comprometa mediante un contrato a no ceder ni transmitir esta información", añade el directivo.Para Diego López Garrido, letrado de la acción popular en el caso de la red de tráfico de datos personales descubierta en enero pasado en Madrid "no está tan claro", sin embargo, "el que toda información económica por definición no afecte a la intimidad". Y añade que un caso como el de El Cobrador del Frac la futura ley no lo aclara ni lo tipifica". "Lo lógico es que hubiera un registro de morosos oficial al que pudiera acceder todo el mundo y que no fuera utilizable de forma mercantil", dice López Garrido.

Miguel Sarries, socio de la Asociación de Técnicos de Informática, señala que "la legalidad no existe todavía". Y fija una serie de cuestiones que deberían respetarse en un caso de este tipo: que la vida de esos datos sea limitada, que los que aparecen en el listado tengan derechos a rectificar los datos y que sean advertidos de que van a aparecer en esa lista. El presidente de esta misma asociación, Jaime Argila señala que con la futura ley "cada persona que esté en el fichero tendría derecho a ver si está y exigir una rectificación".

En la central de riesgo del Banco de España existe un listado oficial de morosos bancarios que en los últimos meses está aumentando espectacularmente. Allí señalan que no se pueden pronunciar sobre esta nueva inicitiva "mientras no esté legislado este terna", señala un portavoz.

Oficina en París

La Asociación Nacional de Entidades Financieras posee otro listado de datos de impagados que, está a disposición de las entidades asociadas. Su responsable señala que "en la futura ley aparece que los informes de solvencia deben comunicar al afectado que se le ha incluido en una base de datos".El Cobrador del Frac -que nació hace cuatro años tiene 300 empleados, y este año esperan duplicar los 400 millones de facturación de 1991 -aborda su expansión internacional. Va a abrir una oficina en París para atender exclusivamente a clientes franceses que quieran recuperar lo que les han dejado a deber ciudadanos españoles que, al parecer, han dejado mal recuerdo en los sectores galos de hostelería, agencias de viaje, transporte y empresas de la construcción.

Entre los 70.000 datos de morosos (personas jurídicas o naturales) no hay ninguna entidad financiera porque tienen por norma no aceptar ningún encargo para cobrar deudas a ayuntamientos, bancos y personajes políticos. Para el resto de personas públicas por otros motivos que no sean políticos no hay ningún problema en incluirlos en lista se ganan del adjetivo de "morosos peligrosos".

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