KO judicial para Mike Tyson

Mike Tyson vio el lunes cómo su carrera como campeón de los pesos pesados comenzaba un largo paréntesis después de que un jurado de Indianápolis, capital del Estado de Indiana, le declarase culpable de haber violado a una joven de 18 años el pasado mes de julio. Tyson, de 25 años, mantuvo la compostura al escuchar el veredicto, un fuera de combate casi definitivo para quien, justamente hace dos años -el 10 de febrero de 1990- perdió por KO el título de campeón mundial de los pesos pesados. Aquel combate, que terminó en el décimo asalto, fue en Tokio, y en el otro lado del cuadrilátero estaba su compatriota James Buster Douglas.En esta ocasión, le ha noqueado una muchacha a la que conoció mientras ella participaba en el concurso de belleza Miss América Negra. El combate ha durado 13 días. Durante ese tiempo, los abogados de la acusación intentaron demostrar que la noche en que Tyson fue a buscar a la joven a su hotel lo hizo con la intención de mantener relaciones sexuales con ella, pero la engañó diciéndole que iban a ir a una fiesta y a ver el paisaje. La defensa, sin embargo, sostiene que la chica supo en todo momento lo que iba a ocurrir, aunque luego se sintió despechada. En el juicio, ella afirmó, y los médicos forenses corroboraron, que en la habitación del hotel de Tyson el boxeador la violó y le hizo "un daño horroroso".

Los ocho hombres y cuatro mujeres del jurado, después de nueve horas y media de deliberaciones, durante las que se comieron un par de pizzas enormes, llegaron a la conclusión de que el hecho de que la joven bajase de su habitación con una cámara de fotos -después de decirle a su compañera que fuera con ellos y ponerse el abrigo con el pantalón del pijama debajo- era prueba suficiente de que en ningún momento sospechó de las intenciones del boxeador.

Las organizaciones feministas y de defensa de los derechos de la mujer se han declarado satisfechas al conocer el veredicto, al considerarlo un estímulo para aquellas mujeres que siguen teniendo miedo a denunciar que son víctimas de abusos sexuales.

Dominado por un carácter ultraviolento, sin apenas preparación intelectual, con un historial familiar nefasto, Mike Tyson comenzó su andadura siendo un delincuente juvenil en las calles de Nueva York, y alcanzó la cima a base de puñetazos y de ser más duro que sus oponentes. Con una cuenta corriente de millones de dólares, Tyson reflejaba la imagen del típico deportista que no puede superar el éxito. Su primera mujer, la actriz de televisión Robin Givens, le abandonó después de que la utilizara como saco de entrenamiento.

Tyson, en una entrevista concedida hace cinco años a The New York Times, se definió así: "Cuando lucho con alguien quiero quebrar su voluntad, sacarle el corazón y enseñárselo. La gente dice que esto es primitivo, que soy un animal, pero cuando pagan 500 dólares por ver cómo lo hago es que hay mucho hipócrita por el mundo. Lo que hago es una obsesión; si no me dedicara al boxeo estaría continuamente quebrantando la ley".

La juez Patricia Gifford decidirá el próximo 6 de marzo si, a la vista de que ni siquiera el boxeo ha conseguido apartar a Tyson de la delincuencia, es más conveniente apartarlo a él de la libertad. Si es así, su condena puede oscilar entre los seis y los 60 años de prisión. En caso contrario, la juez puede suspender la sentencia.