Dos muertos por el Ejército camboyano en violentos disturbios en las calles de Phnom Penh

Las fuerzas de seguridad camboyanas dispararon ayer contra grupos de manifestantes en la capital, Phnom Penh, matando a dos personas. La capital está experimentando en los últimos días las protestas más violentas de la reciente historia del país asiático, al que recientemente regresó tras un largo exilio el príncipe Norodom Sihanuk.El Gobierno ordenó desplegar al Ejército en las calles de la ciudad ante las dificultades de la policía para restablecer el orden. La agitación ha originado que los jefes de los odiados jemeres rojos, cuyo regreso por segunda vez a Camboya estaba previsto ayer dentro del plan de pacificación del país, hayan decidido retrasar su viaje a Phnom Penh.

Un manifestante de unos treinta años fue herido por los disparos del Ejército y poco después moría en el hospital. Una segunda persona, un estudiante de medicina, cayó también bajo las balas de los militares, y cuatro personas más resultaron heridas.

La revuelta se desencadenó tras una manifestación por las calles de la capital jemer en protesta contra la corrupción política. La policía detuvo y maltrató a un estudiante que se manifestaba en favor de los derechos humanos. Los manifestantes estaban dirigidos por estudiantes, pero grupos incontrolados se sumaron a la protesta atacando establecimientos y casas ya las fuerzas de seguridad.