Los jueces de Madrid difunden una dura nota contra el Gobierno por el caos de los juzgados

Los jueces de Madrid, reunidos en junta general el pasado miércoles, acordaron por unanimidad denunciar ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y el Ministerio de Justicia la "caótica situación" de los juzgados, que consideran "insostenible" en los civiles y en los de lo social. La carencia de medios materiales y personales, y la falta de voluntad política para remediarla, les ha llevado a plantear "la absoluta imposibilidad de otorgar tutela judicial efectiva". Los jueces de Madrid consideran "ineludible" que en el plazo máximo de tres meses se racionalice el número de juzgados para garantizar la justicia a los ciudadanos.

Presididos por el magistrado decano, Antonio García de Paredes, los jueces de la demarcación de Madrid (se excluyen los del Supremo, la Audiencia Nacional y el Tribunal Superior) acordaron denunciar, a través del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, ante el Consejo General del Poder Judicial, el Ministerio de Justicia y la opinión pública, "la caótica situación por la que atraviesa la Administración de justicia, especialmente en algunos órdenes jurisdiccionales", como en los juzgados de primera instancia [asuntos civiles] o de lo social [antiguas magistraturas de Trabajo], en los que "resulta ya insostenible", afirman.García de Paredes -acompañado de representantes de los magistrados de primera instancia, de instrucción, de lo penal y de lo social- planteó ayer, en una conferencia de prensa, "el clamor" de todos los sectores judiciales ante la situación que atenaza el funcionamiento de la justicia en la Comunidad de Madrid.

Los jueces de Madrid concretan su denuncia en "el excesivo volumen de asuntos que pesan sobre cada juzgado, la inexistente política de personal, la carencia de medios materiales y las inadecuadas leyes procesales". Todas estas deficiencias "son causas, entre otras", añaden, "del mal funcionamiento de los juzgados".

Asimismo denuncian "la falta de voluntad política del Ministerio de Justicia y del CGPJ para la decidida solución de esta situación", de la que "deriva", recuerdan, "la absoluta imposibilidad de otorgar la tutela judicial efectiva que proclama la Constitución".

Comparecencias urgentes

Para salir de este estado, los jueces de Madrid exigen del CGPJ "la urgente comparecencia" de los vocales adscritos a la Comunidad de Madrid, para que expongan las directrices políticas y las medidas concretas que se estén aplicando o puedan llegar a aplicarse para solucionar esta situación". Igual exigencia se hace al Ministerio de Justicia, "en la persona del subsecretario del departamento". (El problema para la resolución de esta situación reside en que el CGPJ tiene la competencia sobre los jueces y el funcionamiento de la oficina judicial, mientras que el Ministerio de Justicia tiene la competencia sobre los medios materiales y el resto de personal de los juzgados).En el mismo comunicado de la junta general de jueces de Madrid se considera "ineludible" que en el plazo máximo de tres meses "se establezcan los módulos racionales de trabajo en cada orden jurisdiccional", con el objeto de determinar con precisión "el número de juzgados que garanticen la tutela judicial efectiva a la que todos los ciudadanos tienen derecho".

Finalmente, los magistrados madrileños exponen que el mantenimiento del oscuro y confuso entramado de normas procesales, que enturbian y retrasan la rápida respuesta jurisdiccional", supone una situación "insoportable". En resumen, los jueces reclaman que "de una vez por todas se afronte con rigor la reforma de las leyes procesales".

Redistribución del trabajo

El decano de los jueces de Madrid propuso ayer el diálogo y la cooperación para fijar los módulos de trabajo más adecuados. García de Paredes anunció que si en el plazo de tres meses no se reorganizan los juzgados madrileños, la propia junta general de jueces fijará los módulos.En los juzgados de instrucción se observa un "parón" en los procedimientos abreviados, según aseguró el magistrado José González Ollero. Sin embargo, este juez se mostró partidario de la implantación de los denominados "juicios rápidos", siempre y cuando se planteen con voluntad de "permanencia y eficacia".

Los retrasos en la ejecución de las sentencias penales y la acumulación de trabajo en los juzgados de lo social son otras de las carencias percibidas por los jueces de Madrid. Por su parte, la juez de primera instancia Almudena Cánovas del Castillo expuso la complejidad que supone la aplicación de 82 procedimientos distintos, algunos de los cuales sirven para materias idénticas, como en el caso de los arrendamientos.